El historiador Taylor Rodríguez García, cronista oficial de Palavecino, presentó su libro Oratorio-Capilla de Santa Bárbara en el proceso histórico de la comarca cabudareña, 1793–2009, este sábado a las 10 de la mañana, luego de la liturgia en el mismo recinto sagrado.
En tal sentido, el cronista afirma que la investigación, cuya impresión de mil ejemplares será patrocinada por la familia Alvarado, está conformada por tres capítulos y sus respectivos anexos, además de una ilustrativa portada con una fotografía antiquísima de la capilla rodeada de vecinos con sus sombreros y atuendos de la añeja época.
En el primer capítulo el historiador reconstruye, a manera de aproximación, la vida de la familia Alvarado de la Parra, como propietarios en el Valle del Turbio, sus antepasados en El Tocuyo y su expansión hacia Yaracuy.
Subraya que Alvarado de la Parra, ejerció un cargo “casi que vitalicio, sumándosele casi treinta años como alférez real del Cabildo de Barquisimeto, cargo que por cierto se compraban, pues no eran elegibles, lo que le otorgaba una connotación social”.
Alvarado de la Parra fue dueño de seis unidades agropecuarias en esta otrabanda del río Turbio, pero la hacienda más conocida fue la conocida con el nombre de Santa Bárbara, ubicada en la hoy entrada de Cabudare que se extendía hasta la zona rural de Palavecino. ‑No fue la capilla que le dio el nombre a la hacienda, todo lo contrario, apunta Rodríguez.
Evolución de la propiedad
El cronista explica que el libro también contiene entre sus capítulos la evolución de la propiedad en base a documentos encontrados en dos repositorios: Registro Principal de Barquisimeto, con ayuda de Octavio Galindez, y Archivo General de la Nación, en donde se obtuvieron datos para lograr la reconstrucción de la historia del oratorio desde 1797 hasta 1987, último año este que registra 19 dueños, algunos por compras directas y otras por herencias.
El tercer capítulo de la obra es una compilación de otros autores, destacando algunos errores que señalan que la histórica capilla había sido la mansión de un capitán general.
Al libro en contenido histórico, se le incorporan informaciones producidas por una autoridad en el campo de la arquitectura venezolana como lo es el maestro Graciano Gasparini, autor de muchas obras.
Sostiene Gasparini que “esta capilla es la más bella y arquitectónicamente más importante entre todas las existentes en Venezuela”.
Luego de la liturgia presidida por el presbítero Juan Bautista Briceño Pérez, párroco de Cabudare, fue presentado el libro El Oratorio-Capilla Santa Bárbara, en el proceso histórico de la comarca cabudareña 1793–2009 del profesor Taylor Rodríguez García, cronista oficial de Palavecino.
El acto de bautizo de los primeros ejemplares se efectuó con hojas del jabillo real donde acampó el Libertador Simón Bolívar en 1813 y pétalos de rosas rojas simulando el manto de la patrona de la ermita en referencia.
El bautizo se celebró en la misma capilla, con una concurrida audiencia que escuchó atenta las precisiones del autor sobre el contenido de la obra y su proceso de investigación que duró dos años “gracias al trabajo de muchos”.
La obra, cuyo patrocinio lo realizó la familia Alvarado por estar íntimamente ligada a la historia local y a la imagen de Santa Bárbara, contará con un tiraje de 1000 ejemplares para marzo de 2013, que se distribuirá gratuitamente en todas las bibliotecas de las escuelas y liceos del municipio.
El libro revela que alrededor del sagrado lugar se constituyó el Cabudare Colonial, “en el cual no había todavía un templo”.
”Hoy reiteré lo que destaqué en el año 2009: Me opongo abiertamente a que la capilla sea estatizada si no hay una política definida que preserve los patrimonios edificados”, subrayó el historiador, agregando que el recinto debe mantenerse en el tiempo para que las generaciones futuras encuentren un punto de referencia, de identificación, de valoración, de pertenencia con Cabudare, hoy en extinción.
Las crónicas
La ermita u oratorio tuvo dos etapas de construcción: en 1797 se inició y duró 15 años hasta que el 26 de marzo de 1812, el terremoto la derrumbó.
Se tramitaron los permisos para su nuevo levantamiento, pero fue negado pese a que Juan José Alvarado de la Parra, su propietario era realista.
Sin embargo, más tarde se admite el permiso y el recinto fue reconstruido en 1815 e inaugurado el 1º de enero de 1820, por el ya fallecido Alvarado de la Parra un año antes y fue sepultado en el altar mayor.
La capilla está edificada en una extensión de terreno de 8.490,23 metros cuadrados y ha tenido hasta el presente 20 propietarios por herencia o compra directa.
Patrimonio del alférez
A manera de compendio se registra la información sobre el amplio patrimonio del Alférez Real don Juan José Alvarado de la Parra:
‑7 unidades de producción agropecuarias. De ellas 3 con trapiches
‑2 casas con solares, vecinas a la plaza Real de Barquisimeto
‑1 oratorio en devoción a Santa Bárbara, en su etapa final nueva construcción
‑6 casas en las inmediaciones de su hacienda Santa Bárbara en Cabudare
‑28 mulas, indeterminada cantidad de cabezas de ganado vacuno y equino
— Dinero en efectivo: 18.500 pesos, de ellos 500 de oro
Bienes de uso personal:
-1 silla de montar a caballo con un herraje de plata, estribo y pistola.
-1 espada de oro, terno de hebillas, charretera y cobartín también de oro y otras prendas de plata no especificadas.
Bienes de uso doméstico (muestra):
- 1 Palangana de plata
- 1 jarro, cubiertos y cuchillos con cacha de plata
POR Luis Alberto Perozo Padua
El oratorio Santa Bárbara comenzó a edificarse en 1797, por el rico propietario Juan José Alvarado de la Parra