Las Rosas de Cipriano Castro: Dos vidas y un mito
Juan Ernesto Bello Osío
Genealogista, investigador y diseñador gráfico
Se cruzaron en el camino el periodismo y la genealogía para desmontar el mito y leyenda sobre el nombre y figura artística asociados a una persona, siendo en realidad dos vidas distintas con ciertas similitudes y orígenes.
A ciencia exacta no sabremos qué fue lo que sucedió en el camino para que una de estas mujeres quedara a la sombra y otra a la luz, si fue adrede, una especulación en el mundo del espectáculo o simplemente hay una realidad detrás de cada una de ella y los rumores de un padre en común.
Al ir construyendo las vidas de estas mujeres pareciera que una de ellas trata de desmarcarse de un pasado y la otra le encaja el traje perfecto bajo circunstancias casa idénticas, donde el rumor descartado se convierte en una especie de alfombra roja.
Como genealogista sumergido en la ciencia de darle la forma más correcta a cada persona y su vida, con sus fuentes argumentadas y si fuere el caso de la ausencia de estas, intentar comprobar los relatos que giran en torno a cada ser con la documentación más fiel posible, alejándose de historias y otros cuentos de camino, que no dejan de ser importantes y valiosos como la tradición oral, pero siempre terminan aliñando la historia con elementos pintorescos que intentan darle por supuesto, más brillo y hacerlo más interesante.
Expuesto y resumido en formato video y con otros documentos está relatada brevemente la vida de (ver video: Lucila Mendez) joven actriz venezolana que por allá en los años 20 junto a su familia llegan a los Estados Unidos para incursionar en el mundo del cine.
Dicen muchos titulares y artículos al respecto de su vida, que era la primera mujer venezolana en el cine norteamericano y que además era la hija de Cipriano Castro, presidente de Venezuela desde 1899 hasta 1908, quien fuera reemplazado por su compadre Juan Vicente Gomez.
Desde raíz hay elementos que se tienen que revisar para entender la historia de Lucila y de quizás otras muchas mujeres y hombres de Venezuela, que corrieron con la pésima suerte de la ilegitimidad y de no ser reconocidos dejando la figura del padre bajo una eterna incógnita cuando los casos documentales no muestran indicios de saber quién fue. Lo cierto es que Lucila Josefina Mendez, nació en Caracas un 31 de enero de 1906 y bautizada el 9 de marzo de 1908 en Caracas, hija natural de Luciana Mendez Isava. Su madre Luciana nació el 8 de enero de 1886, natural de Trinidad y Tobago, isla que encierra como un refugio, historias y tránsitos de muchos personajes por casi 30 años.
Con apenas 19 años Luciana habría quedado embarazada de por quien las historias señalan al presidente Castro como el responsable de esta fechoría. Pero documental y cronológicamente hablando surgen hechos que nos cuentan lo siguiente. Luciana Mendez Isava quien además en los documentos migratorios indica llamarse Luciana Isava, va acompañada de sus hermanas Dolores y Casimira, quienes parten desde Trinidad y además los acompaña Robert Hillary Bryce McNeil, natural de Couva, Trinidad, de 23 años. Ingeniero Civil como declara en su salida de Trinidad el 1 de julio de 1913 a bordo del navío «Scottish Prince» acompañado de Luciana, 28, Luciana de 7 años de edad y Josefina de 4. Robert se señala como padre de las dos niñas, que ademas curiosamente llevan el apellido natural de su madre «Isava».
Bryce indica que tiene familia en Canada, pieza importante para entender su destino final, ya que murió ahí en Montreal el 17 de septiembre de 1913, pero su edad es clave y no menos importante, ya que lo sitúa para 1890 y para los nacimientos de Luciana y Josefina, ambos progenitores, 15 y 17 años respectivamente, eran menores de edad, lo cual nos muestra un escenario complejo para un posible registro de matrimonio y un reconocimiento legítimo en ese entonces de sus 2 hijas. Para 1910 en Caracas fue conseguido el registro de nacimiento y defunción de una tercera hija, que murió párvula ese mismo año llamada Maria Cristina con poco tiempo de haber nacido.
Tal como explico en el vídeo ‹‹Lucila: una vida llena de misterios›› en las declaraciones de solicitud de nacionalidad y residencia por su madre Luciana, el 5 de agosto de 1926, se lee que su madre (Luciana) y el Sr. Bryce contrajeron matrimonio el 7 de enero de 1905* un año antes del nacimiento de Lucila y que además al llegar a Estados Unidos 10 Julio de 1913 contraen matrimonio civil en New York. Es muy importante señalar la siguiente información en el registro de matrimonio: ¡Luciana Mendez Isava, declara que es su segundo matrimonio y es viuda! declaración que trae mucha confusión para el resto de los elementos en la historia.
Además, el Sr. Bryce era de raza oscura (Dark) lo que para en ese entonces el término oscuro era usado para las personas afroamericanas. Esta información está contenida en los libros de matrimonio.
De ahí en adelante casi en todas las fuentes sobre Luciana se puede encontrar como Bryce o de Bryce. Otros documentos migratorios que he podido constatar inclusive su hija Lucila también hizo uso del apellido Bryce hasta su matrimonio con Ralph Waldo Ince, el productor cinematógrafo que le abrió las puertas a la propia Lucila y su hermana Josephine (Josefina).
1926
Es este año donde las hermanas Mendez, Lucila y Josefina aparecen en varias películas y empieza a rodar en impresos artísticos donde se suele decir que son hijas del presidente Castro, para el mismo tiempo donde su madre hizo la petición de residencia y además, año en que Lucila contrajo matrimonio con el Sr. Ince.
El documento de matrimonio indica que ella es hija de Caprina Castro y L. Mendez, por lo que, ¿podemos considerarlo como un error de transcripción en adaptaciones fonéticas mal interpretadas por aquel funcionario norteamericano?
No podemos dudar de lo indicado por una institución del estado sobre los datos civiles de los contrayentes, pero ¿cómo podría Lucila Méndez indicar la figura de su padre e indicar la legitimidad de los hechos? Además, para 1926, Cipriano Castro tenía 2 años de fallecido. Sumado a esto su hermana Josephine quien realmente se llamó Josefina, nació en Port of Spain el 1 de noviembre de 1908 y fue registrada en en Caracas el 4 de abril de 1910 por su propia madre Luciana Mendez Isava:
Josephine contrajo matrimonio en Estados Unidos con el siciliano Giuseppe Zingarelli el 20 de junio de 1930, donde el registro de matrimonio Josephine indica que sus padres son el Sr. Robert Bryce y Luciana Mendez:
Dicho lo anterior, estamos ante un escenario como ya dije de muchas incongruencias cronológicas que no permiten esclarecer o aportar cercanía a la figura del ex-presidente Castro, salvo el registro matrimonial de Lucila con Ralph Ince y que además, a contra parte, surge documentación, hechos y citas que conectan más civil y biológicamente a las hermanas Mendez con el Sr. Robert Bryce, quien pudo ser padre de ambas y que además pudo estar conjunto a su pareja, bajo un escenario complicado al ser menores de edad, no estar casados y sumar rechazo racial por su condición afroamericana.
Una Rosa por descubrir
Y sí, los que especularon por años en que una hija de Cipriano Castro fue actriz, estuvieron en lo cierto y que además esta se llamaba Rosa Castro, pero no fue la Lucila que conocemos, que por algún papel protagonista en alguna película le hiciera famosa llamarse Rosa Castro y ser hija del controversial ex-presidente. El entorno es esta mística Rosa más bien se nos escurrió por mucho tiempo, entre nombres, lugares y coincidencias. Muchas cosas encajaron para la década de los años 20’s en el mundo del cine donde dos mujeres venezolanas, contemporáneas asaltaban el séptimo arte.
Luego de mis primeras alegaciones en el vídeo de Lucila Mendez, la suspicaz y detallista periodista mexicana Claudia Pérez Atamoros me contacta y comenta que no, que no hay congruencias en las fuentes familiares y documentales de que Rosa Castro fuera Lucila Mendez y que, por el contrario, las evidencias que tenía ella por su parte nos permitían separar la gimnasia de la magnesia, de poner las cosas en orden y por supuesto, darle rostro a cada personaje. El trabajo documental y biográfico sobre Rosa Castro, viene impulsado en su trabajo sobre grandes mujeres periodistas México, tratando por supuesto de reconstruir los orígenes venezolanos de la insigne y escurridiza periodista.
16 de enero de 1908 – Candida Rosa es apadrinada por Trino Castro, hermano del presidente Cipriano Castro
Puestos manos a la obra, fuimos desgranando cada uno de las pistas y hechos para realmente darnos cuenta de que estábamos ante dos figuras solapadas, como quien oculta a otra y viceversa. Rosa Castro o Candida Rosa Hernández, caraqueña, era hija natural de Dominga Hernández Lander y es gracias a su madre que aparece en los propios documentos de Rosa tanto en México como en Venezuela que pudimos confirmar lo propiamente declarado por Rosa, sus hijos y nietos, que toda su vida estuvo clara que su padre era Cipriano Castro. En 1908 fue apadrinada por Trino Castro, hermano del presidente aun estando en su cargo antes de partir a Europa.
El manifiesto de pasajeros que parte desde La Havana el 5 de abril de 1915 nos trae a la propia Dominga (Domitila) acompañada de sus dos hijas y además, registradas las 3 con el apellido Castro. Se leen sus nombres y sus edades respectivamente. Dominga 26, Candida 7 y Anna 4 (Sotera Ana, nacida en Caracas el 28 de abril de 1910)
Descarga aquí ⇒ CRONOLOGIA ROSA CASTRO
Mucho más se puede aclarar y entender en un acta de defunción como la de su madre, Dominga Domitila Hernandez Lander, donde se indican detalles muy completos, que para 1963 señala sus padres, su esposo Miguel Saddy (origen sirio) y los 7 hijos que viven para ese entonces, entre ellos Rosa Castro:
A continuación de la mano de Claudia Pérez Atamoros, recorran los hechos que hemos documentado y que para que dé una vez por todas queden separadas las vidas de estas dos mujeres que han estado camuflajeadas y difícilmente bien identificadas que, por una u otra razón, quizás por cosas caprichosas del destino quiso que fueran así, novelescas, densas, misteriosas. Para continuar esta historia puede leerse en el siguiente portal: https://www.opinion51.com/claudia-perez-2411-semblanza-caso/