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Llegan a Barquisimeto las Hermanas de La Caridad

Luis Alberto Perozo Padua
Periodista especializado en crónicas históricas 
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En las RRSS @LuisPerozoPadua

Bar­quisime­to, 5 de diciem­bre de 1897.

En la fres­ca mañana de ayer, bajo un cielo diá­fano que parecía ben­de­cir tan noble acon­tec­imien­to, la Estación Cen­tral del fer­ro­car­ril Bolí­var se vio engalana­da con ban­der­ines tri­col­ores y guir­nal­das de papel.

Allí, pun­tuales, aguard­a­ban el Dr. Anto­nio María Pine­da y el com­er­ciante don Eduar­do Lind­heimer para recibir a las cua­tro Her­man­i­tas de San José de Tarbes, lid­er­adas por la excel­sa Madre San Simón.

Tras una breve misa en la igle­sia de la Cat­e­dral, la comi­ti­va avanzó en car­ru­a­je hacia el antiguo Hos­pi­tal de la Cari­dad, donde serían recibidas con vítores y el eco de nue­stros himnos.

La direc­to­ra Auro­ra Rivas sen­ta­da al cen­tro, con las alum­nas de la Escuela Nacional de Enfer­meras Doc­tor Juan Alber­to Oli­vares de Barquisimeto
Enfer­meras de la Con­gre­gación San José de Tarbes

De Fran­cia a Venezuela

El 13 de julio de 1889 desem­bar­caron en La Guaira diecio­cho reli­giosas de la Con­gre­gación de San José de Tarbes, proce­dentes de Can­taous, Fran­cia. Fueron recibidas por el Pres­i­dente de la Repúbli­ca, Dr. Juan Pablo Rojas Paul, con el encar­go de admin­is­trar el recién dec­re­ta­do Hos­pi­tal Var­gas y otros dispensarios.

En los años sigu­ientes, aten­di­en­do solic­i­tudes de diver­sas gob­er­na­ciones, las Her­manas se establecieron en Valen­cia, Puer­to Cabel­lo y Barquisimeto. 

La Con­gre­gación de las Her­manas de San José de Tarbes, fue fun­da­da en 1843

El empeño y dis­ci­plina de la con­gre­gación hicieron cre­cer su número de 18 a 80 reli­giosas en ape­nas cin­co años, mar­can­do el ini­cio de la enfer­mería pro­fe­sion­al en todo el ter­ri­to­rio nacional.

En 1578, vein­ticin­co años después de fun­da­da Nue­va Segovia de Bar­quisime­to, surgió el Hos­pi­tal de San­ti­a­go, primer refu­gio para enfer­mos en Lara y de toda Venezuela, aten­di­do por esclavos y curan­deros bajo la égi­da del cléri­go Pedro del Castillo. 

En 1812 fue reba­u­ti­za­do como Hos­pi­tal de San Lázaro, denom­i­nación que per­duró has­ta 1837, cuan­do quedó en evi­den­cia la urgen­cia de un rele­vo hospitalario.

INAUGURACIÓN DEL NUEVO HOSPITAL DE CARIDAD (1918) Si se lee la reseña de esta her­mosa fotografía, se obser­van al cen­tro las autori­dades civiles, mil­itares y ecle­siás­ti­cas del Esta­do Lara, acom­pañadas del doc­tor Anto­nio María Pine­da, además de gran can­ti­dad de públi­co, lo cual ori­en­ta a pen­sar que fue un impor­tante acon­tec­imien­to para la ciu­dad. A la derecha, un con­sid­er­able número de mil­itares. En el extremo izquier­do e infe­ri­or, niños y adul­tos de clases pop­u­lares, que se recono­cen en la fotografía, no sólo por su sen­cil­la ves­ti­men­ta, sino tam­bién por el calza­do: Alpar­gatas o coti­zas. Cortesía Museo de Barquisimeto

El sueño de Pineda 

Grad­u­a­do en París y férreo defen­sor de la anti­sep­sia lis­te­ri­ana, el Dr. Anto­nio María Pine­da (n. 1850) regresó a Bar­quisime­to deci­di­do a trans­for­mar la med­i­c­i­na local. Bajo su impul­so, en 1918 se inau­guró el Hos­pi­tal de La Cari­dad en el mis­mo solar del antiguo San Lázaro (calle Obis­po, hoy car­rera 15 entre calles 25 y 26), y fun­cionó has­ta 1954, cuan­do se trasladó a su sede en la Aveni­da Var­gas, erigién­dose en la mejor estruc­tura hos­pi­ta­lar­ia de Venezuela.

Durante el brote de fiebre amar­il­la de 1891, don Eduar­do Lind­heimer, com­er­ciante francés res­i­dente en Bar­quisime­to, quien más tarde se aso­cia­rá con Isidro Loeb para fun­dar la fir­ma “El Bazar Frances; cayó grave­mente enfer­mo. Ingre­sa­do en el vetus­to San Lázaro bajo los cuida­dos de Pine­da, con­stató la fal­ta de enfer­meras formadas.

Al reco­brar la salud, se con­vir­tió en ali­a­do y mece­nas del doc­tor, com­par­tien­do la ambi­ción de traer Her­man­i­tas de San José de Tarbes para ele­var la cal­i­dad de la asis­ten­cia y la for­ma­ción de auxiliares.

Ges­tiones ante el Presidente 

En 1897, el Dr. Pine­da, jun­to a don Eduar­do Lind­heimer y el Vic­ario Capit­u­lar, Mon­señor Dr. Ague­do Felipe Alvara­do, ele­varon al gen­er­al Aquili­no Juares, pres­i­dente del esta­do Lara, una solic­i­tud para que inter­viniese en las ges­tiones diplomáti­cas y admin­is­tra­ti­vas nece­sarias para el arri­bo de las Her­manas de San José de Tarbes.

Su cometi­do: encomen­dar­les la admin­is­tración y asis­ten­cia del Hos­pi­tal de La Cari­dad, en miras de replicar el éxi­to alcan­za­do en Cara­cas, Valen­cia y Puer­to Cabello.

«…El proyec­to lo com­parte con Anto­nio María Pine­da en 1897, mien­tras estu­vo hos­pi­tal­iza­do por enfer­medad. Ambos se diri­gen al Gen­er­al Aquili­no Juárez, quien accede a tal solic­i­tud y meses después se conc­re­tan las ges­tiones. Las Mon­jas con­taron con Sat­ur­na Martínez, María Yépez Melo y María Fer­nán­dez como colab­o­rado­ras (…) Las Her­manas Max­im­i­na, María y Clemen­cia fueron las primeras en lle­gar (…) La Her­mana Max­im­i­na asum­ió las fun­ciones de enfer­mera jefe…», apun­ta el Dr. Rafael A. S. Cebal­los Garzón en su libro Del Hos­pi­tal de Cari­dad al Hos­pi­tal Cen­tral de Bar­quisime­to 1880–1954.

El 3 de diciem­bre de 1897, por el fer­ro­car­ril Bolí­var, arrib­aron a la Estación Cen­tral de Bar­quisime­to cua­tro Her­man­i­tas de San José de Tarbes. Encabezadas por la Madre San Simón, y tras la misa en la Cat­e­dral, fueron hom­e­na­jeadas en la vía públi­ca con aplau­sos, ban­deras y vítores, como autén­ti­cas heroí­nas lle­gadas para com­bat­ir las enfer­medades que afligían a la ciudad.

Fun­dadores del Hos­pi­tal de La Cari­dad (Bar­quisime­to). En el medio y atrás, el Dr. Anto­nio María Pine­da, sen­tadas y en los extremos se apre­cian las Her­manas de La Cari­dad. De uni­forme blan­co con negro, las pro­fe­sas. Y de uni­forme solo blan­co, las novi­cias. Foto: autor desconocido

Primeros actos de organización 

En sus primeros días, las Her­manas instau­raron: Higiene estric­ta: lava­do de manos con hipoclori­to de cal antes y después de cada cura. Ron­das pro­gra­madas: cua­tro vis­i­tas diarias con reg­istro en bitá­co­ras clíni­cas. Capac­itación de aux­il­iares: cur­sos teóri­co-prác­ti­cos para cuarenta “prác­ti­cos” locales, ger­men de la Escuela de Enfer­mería del Esta­do Lara (1910).

La Her­mana Max­im­i­na, enfer­mera jefa, lid­eró estas ini­cia­ti­vas, con Sat­ur­na Martínez, María Yépez Melo y María Fer­nán­dez como instruc­toras y supervisoras.

Con el respal­do del Dr. Pine­da nació la Sociedad Hijas de La Cari­dad, encar­ga­da de orga­ni­zar bazares en Bar­quisime­to, Cabu­dare, Quí­bor, Siquisique, Bobare, Yaritagua y Río Claro. El más desta­ca­do se real­izó en el Teatro Munic­i­pal el 19 de abril de 1918, declar­a­do “Día de la Cari­dad”, cuya recau­dación finan­ció las obras finales del Hos­pi­tal de La Cari­dad, reforzan­do el lazo entre la comu­nidad y la salud pública.

Aque­l­la alian­za entre cien­cia, diplo­ma­cia y entre­ga cris­tiana, que mate­ri­al­izó su pun­to cul­mi­nante el 3 de diciem­bre de 1897, legó a Bar­quisime­to una enfer­mería pro­fe­sion­al sin parangón. Hoy, en cada corre­dor del cen­te­nario Hos­pi­tal La Cari­dad, per­du­ra la memo­ria de aque­l­las her­manas que, con su fe y su saber, dieron un nue­vo alien­to al cuida­do de la vida.

Enfer­meras bar­quisimetanas grad­u­adas en Cara­cas. Foto real­iza­da en el antiguo Hos­pi­tal Dr. Anto­nio María Pine­da, hoy Museo de Bar­quisime­to. Desta­can en la primera fila infe­ri­or: Angela Men­doza Quero, primera del bor­de izquier­do; y la sép­ti­ma, en la mis­ma fila Auro­ra Rivas. Cir­ca 1950

Fuente: Luis Eduar­do Traviezo Valles. Revista Vene­zolana de Salud Públi­ca, ISSN‑e 2343–5534, ISSN 2343–5526, Vol. 4, Nº. 1 (Enero-junio (2016)), 2016, págs. 73–76
Rafael A. S. Cebal­los Garzón. Del Hos­pi­tal de Cari­dad al Hos­pi­tal Cen­tral de Bar­quisime­to 1880–1954. Edi­ciones de la UCLA 2008
Revista El Cojo Ilustra­do. Año 1901

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