Los “colectivos” de ayer
Luis Heraclio Medina Canelón
Historiador
El extraordinario documento gráfico que acompaña esta crónica, data de la segunda mitad de la década de los cuarenta, nos recuerda la existencia de los grupos armados e ilegales promovidos por el gobierno no son nada nuevo
Se observa, al frente de una turba, a los dirigentes del partido Acción Democrática Leonardo Ruiz Pineda con una bandera partidista y Antonio Pinto Salinas con una pistola de gran potencia en su mano derecha y una fornitura militar en la cintura.
Estos grupos armados en aquella época eran llamados “los cabilleros” o “los milicianos” y a ellos se refieren las primeras estrofas del himno del partido: “Adelante a luchar milicanos¡ A la voz de la revolución….¡ Los “milicianos” estaban dotados de gran cantidad de armamento, incluso, armas de guerra y fueron los responsables de una gran cantidad de ataques y hostigamientos a las actividades de la oposición, uno de los más graves ocurrió el 18 de junio de 1946, en el Nuevo Circo de Caracas, cuando los “cabilleros” atacaron a tiros, con un resultado de tres muertos y unos veinte heridos.
La existencia de estos grupos paramilitares, al margen de la ley, fue una de las razones esgrimidas por los militares para el golpe de estado del 24 de Noviembre de 1948. Luego del golpe las actividades de los milicianos continuaron como “resistencia”, siendo ferozmente perseguidos por la Seguridad Nacional, que frustró varios atentados en contra de personalidades del régimen.
Después del golpe de Estado contra Marcos Pérez Jiménez y nuevamente AD en el poder, reaparecieron estos grupos, conociéndose entonces como las “bandas armadas” con su particular accionar violento en las confrontaciones sindicales e incluso en las luchas internas del partido. Son esos episodios que la “historia oficial” de los gobernantes de turno siempre han querido desaparecer.