Taylor Rodríguez García nos contó la historia menuda de Cabudare
Luis Alberto Perozo Padua
Periodista y cronista
luisperozop@hotmail.com
Redes sociales: @LuisPerozoPadua
Hace seis años se nos fue Taylor Rodríguez García, quien nos contó la historia menuda de Cabudare.
“Murió el cronista de Palavecino”, se escuchó decir en la plaza Bolívar de Cabudare la tarde de aquel enlutado lunes. Los vecinos de la concurrida iglesia San Juan Bautista, se estremecieron con la triste noticia que corrió rápidamente.
Taylor Rodríguez creció en su natal Río Tocuyo, en un hogar modesto pero integrado por buenos principios. Desde muy pequeño, se hipnotizaba con las hojas sueltas de EL IMPULSO, único periódico que llegaba por ese tiempo al solitario pueblo torrense.
Hablar de Taylor Rodríguez García, es sin lugar a equívocos, mencionar a Cabudare, es adentrarse a la historia densa del municipio Palavecino, pero también a la historia anecdótica, y nos atrevemos a afirmar que es incluso, debatir sobre las crónicas de los municipios Simón Planas y Torres.
En general, indagar sobre la menuda historia del estado Lara es conseguirse con los apuntes y anotaciones de este acucioso investigador.
El legado del maestro
Escribir de Rodríguez García, es tarea difícil, pues hay que sumergirse en más de 40 obras sobre historia y microhistoria de Cabudare.
Es enumerar más de 30 foros realizados por el Diario EL IMPULSO sobre investigaciones y piezas documentales halladas en repositorios nacionales y estadales sobre el pasado del municipio Palavecino, es adentrarse a las incontables páginas que escribió para libros, revistas, folletos especializados y artículos en diferentes periódicos de circulación nacional y local.
Del decir de la periodista Violeta Villar Liste: “citar al cronista Taylor Rodríguez García, es reencontrarse, sin vacilación, con la historia cabudareña y, sobre todo, con un ser enamorado de su oficio”.
Desde la década de los noventa, Taylor Rodríguez, se entregó con pasión a la historia de Palavecino, cuando fue nombrado, por el Concejo Municipal, en 1992, cronista oficial de la jurisdicción.
Pero como siempre ocurre con los hombres nobles, queda su virtud, sus valores y, sobre todo, su desprendimiento terrenal, “donde sembró para recoger buenos frutos”.
Ese era Taylor Rodríguez García, y así será recordado siempre y para siempre: como el maestro que nos contó la historia menuda de Cabudare.