Blas Bruni Celli, un honorable académico larense
Jorge Ramos Guerra
Historiador y escritor
ardive@gmail.com
Distinguido miembro la Sociedad Venezolana de Historia de la Medicina, como Individuo de Numero en el sillón Nº XXIX, desde 1957. Exministro de Sanidad en el mandato presidencial de Carlos Andrés Pérez
No muy lejos de El Tocuyo, ciudad Madre de Venezuela, a finales del siglo XIX llegaría una familia de inmigrantes italianos al pueblo de Anzoátegui, propicio para la agricultura por su clima frío.
Los Bruni, Celli, Gerbasi, Finizola, procreando hijos que se ofrecerían a Venezuela como profesionales, médicos muchos y políticos otro tanto. De Francisco Bruni y Josefina Celli, surgiría el doctor Blas Bruni Celli, más conocido en el mundo universitario, científico y académico que honra su gentílico larense.
Nacería el 3 junio de 1925, por cuyos estudios sería médico patólogo y oftalmólogo, historiador, filósofo y político venezolano. falleció a los 87 años, el 16 de enero del 2013, en la ciudad de Caracas. Su currículo, califica su reconocimiento como uno de los venezolanos más brillantes de su tiempo.
En el año 1945, escribe Procerato Tocuyano, obra en la que señala la importancia de su pueblo natal, El Tocuyo, en la integración de la nacionalidad venezolana. Se graduó de Médico Cirujano en julio de 1950, en la Universidad Central y de Doctor en Ciencias Médicas, en octubre del mismo año. En 1952 se recibe como Oftalmólogo y especialista en Anatomía Patológica
Individuo de Número de la Sociedad de Historia de la Medicina (1956); Academia Panamericana de Historia de la Medicina (Titular, 1961); Miembro Correspondiente Puesto Nº 47 de la Academia Nacional de Medicina (1962) e Individuo de Número Sillón XV, desde 1965, Individuo de Número de la Academia Nacional de la Historia, Sillón letra K (1965); Individuo de Número de la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales (1977); Miembro Emérito de la Academia Portuguesa de Historia (1992); Individuo de Número Sillón letra M de la Academia Venezolana de la Lengua (1998); Miembro Correspondiente de la Real Academia Española de la Lengua (1998 ¿?) y ministro de Sanidad en 1974–1975 durante el primer período presidencial de Carlos Andrés Pérez.
Para el también académico e historiador Simón Alberto Consalvi, Blas Bruni Celli fue «Científico y humanista, médico y filósofo, historiador y ciudadano. Me detendré en esa última condición, porque Blas no se refugió en la torre de marfil para evadir sus responsabilidades de venezolano. Mantuvo viva su adhesión por la democracia hasta el último momento de sus dias y lo hizo sin las pausa de los tiempos que implican riesgos personales como los mediocres y sangrientos de la dictadura militar de los años cincuenta».
Por su parte, la doctora Claudia Antonieta Blandenier Bosson de Suárez en el Congreso XIII de Anatomía Patológica “Dr. Blas Bruni Celli” nos cuenta que nuestro biografiado «no sólo presentó numerosos trabajos en congresos nacionales e internacionales y otros eventos científicos médicos, sino en los de otras disciplinas, en el medio de historiadores y filósofos. Su repertorio oratorio es inacabable, comprende: discursos pronunciados en el Palacio de las Academias, en las diversas Academias de que es miembro discursos de Instalación de varias Jornadas de Anatomía Ha publicado numerosas obras: trabajos de historia y literarios y muchos más que constituyen fuente para los investigadores en las disciplinas a la que se dedicara hasta su fallecimiento». (17 de enero de 2013).
Tan precisas definiciones de una personalidad como la de Blas Bruni Celli, es de mostrarla en centros de educación, bibliotecas y ya es hora de que la municipalidad tocuyana decrete una plaza para sus ilustres nacidos en la tierra de José Trinidad Morán por aquella sentencia de Nehru: “Solo donde hay tumbas, hay resurrecciones” y a la Historia voy, victoriosa o vencida….