¿Dónde estaba Juan German Roscio el 19 de Abril de 1810?
Jorge Ramos Guerra
Abogado, historiador y escritor
ardive@gmail.com
Lo primero que se debe saber es que, había nacido en 1763, con lo cual para 1795, es decir, 24 años antes de los sucesos del 19 de abril de 1810, se había recibido como doctor en Derecho Canónico y en Derecho Civil. Miranda, le llevará 13 años y dudamos que se hayan conocido. Es mayor que Bolívar (20 años), 17 que Andrés Bello, 10, del prócer civil barquisimetano José Ángel Álamo y 7 del filósofo de la Independencia, Miguel José Sanz. (02.04. 21).
Su formación es eclesiástica y jurídica, porque además de la medicina y fuera de la Provincia, la actividad comercial sería la alternativa para la subsistencia y Roscio no había nacido para ello y para lo que se había formado, solo tenía campo en las dependencias de la Corona donde se desempeñará como Asistente de la Asesoría General de Gobierno desde 1796, Asistente de la Auditoría de Guerra y Juez secular en prácticas de la Real Académica de Derecho Público y en 1808, Fiscal Interino de la Real Audiencia, lo que le hace complicado para andar en conspiraciones políticas, bastante tiene, con la disputa sostenida con el Colegio de Abogados de Caracas, rígido en cuanto al ingreso a la Institución, por su audacia y valentía de enfrentarse con lo más reaccionario del mantuanismo, inquisidores de la “limpieza de sangre” y aún con ello les vencería, incorporándose con plenos derechos al exclusivista “Colegio de Abogado de Caracas” en 1805. Librado de aquella querella, Roscio mantiene conversaciones con los intelectuales de aquella Caracas, donde su prudencia le ganara respeto junto a Francisco Javier Ustáriz, José Cortez de Madariaga, Martin y Tovar y Tovar, José feliz Ribas, Miguel José Sanz, de donde saldría la propuesta de una Junta que ante la invasión de Napoleón Bonaparte a España y la abdicación del Rey, les permitiera alcanzar la libertad con la excusa de defender los “Derechos de Fernando VII” siendo Roscio el redactor de los primeros documentos que justifican ante los venezolanos su constitución y a la propia Corona depuesta, al usurpador y a una “Regencia” con el mismo propósito, porque ya no aceptaba de sus dependencias.
Era la oportunidad de independizarse y ser libres. Aquellos escritos de Roscio le merecieron el calificativo de “revolucionario y faccioso” por parte del Arzobispo Narciso Col y Prat y como mimbro de la Junta, se desempeñaría como ministro de Relaciones Exteriores, emitiendo una comunicación para el gobierno británico que llevaran los Comisionados Simón Bolívar, Andrés Bello y Luis López Méndez, que explicaba lo acontecida en Venezuela, buscando su apoyo, mientras no solo asume la organización del gobierno provincial en lo administrativo, sino que en lo político, se entiende con el resto de las provincias que se consideran capaces para seguir el ejemplo de la de Caracas, frente a lo cual propone, la convocatoria de un Congreso Constituyente, presentando sus necesarias motivaciones y reglamento electoral que a su juicio
«Conoce la Junta Suprema la necesidad de un poder central, y cree que ha llegado el momento de organizarlo. ¿Cómo se podrá de otro modo trazar los límites de la autoridad de las juntas provinciales, corregir los vicios, que también adolece la constitución de estas, dar a las providencias gubernativas aquella unidad sin la cual no puede haber, ni orden, ni energía consolidar un plan defensivo que nos ponga a cubierto de toda clase de enemigos, formar en fin una consideración sólida, respetable, ordenada que restablezca de todo punto la tranquilidad y confianza que mejore nuestras instituciones, y a cuya sombra podemos aguardar a las disipación de las borrascas políticas que están sacudiendo al universo, conservar integro los derechos de nuestro desgraciado monarca y las leyes de la corona?»
Tan sabia alocución corrobora, la capacidad y responsabilidad del doctor Juan Germán Roscio en aquellos momentos, que a 200 años de su fallecimiento tocan a las puertas de la conciencia venezolana de este siglo XXI ¡Busquémoslo!