El 1º de abril de 1818 se creó la Parroquia Religiosa de Cabudare
Yolanda Aris
Cronista Oficial del Municipio Palavecino
El 27 de enero de 1818, se fijaron los límites de la nueva parroquia religiosa a crear en Cabudare, que había sido propuesta por el Obispo Martí en 1785, luego de la visita que efectuó a esta región en 1779. Esta fecha fue planteada por el Prof. Taylor Rodríguez, cronista de este municipio, fallecido en el 2017, y aceptada y decretada por el Concejo Municipal de Palavecino en 1997, como el tercer y definitivo poblamiento de Cabudare, que dio origen al nacimiento de esta ciudad
En consecuencia de haberse cumplido, ese 27 de enero de 1818, el requisito previo de la fijación de límites, se procedió a oficializar, mediante un auto o resolución del Gobernador del Arzobispado de Caracas, Presbítero Doctor Don Manuel Vicente de Maya, la creación de la Parroquia Eclesiástica de Cabudare, el 1º de abril de 1818, como puede apreciarse en ese documento:
…habiendo visto estos autos formados sobre división de Curato y Doctrina de pueblo de Santa Rosa, del Vicariato de Barquisimeto, desmembración de su territorio en las partes habitadas de vecinos españoles y erección de distinto Curato en el sitio de Cabudare; de que resulta, que a consecuencia de las comisiones dadas por este tribunal al Presbítero Bachiller Don Andrés Torrellas y por el del Señor Vice Patrono Real Alférez Real Don Juan José de Alvarado, en decreto de treinta y uno de octubre y ocho de noviembre del año próximo pasado se ha ejecutado, con asistencia de los venerables curas del mismo pueblo y de la Iglesia Parroquial de Barquisimeto, la desmembración del territorio …(Ambrosio Perera. Historia Territorial de los Estados Lara y Yaracuy. 1946. p. 199)
Para comprender este acontecimiento, deben señalarse los antecedentes y el proceso histórico que se dio, para tal decisión.
Para el año 1779, cuando el Obispo Mariano Martí visitó los espacios que hoy forman los municipios Palavecino y Simón Planas, el Cerrito de Santa Rosa y Barquisimeto, ya existía el sitio de Cabudare, cuyos vecinos acudían a la Iglesia de Santa Rosa. Por tal motivo, consideró conveniente la creación de un Curato, señalando que: “… tal vez no será bastante una sola parroquia y que se necesitarán dos, para que estas gentes que viven en esta vega queden asistidas del pasto espiritual”, agregando que “…hasta el 20 de febrero de 1779, tenía confirmadas más de seis mil trescientas sesenta personas…” (Obispo Martí. Documentos relativos a la visita pastoral de la Diócesis de Caracas. 1771–1784. p. 57 y 58).
Esta solicitud fue realizada en 1785 y finalmente considerada en 1817, cuando se ordena establecer los límites de la nueva parroquia y su desmembración de la parroquia de Santa Rosa, lo que se realizó, como se ha mencionado, el 27 de enero de 1818.
El historiador Ambrosio Perera en su libro Historia de la Organización de los Pueblos Antiguos de Venezuela, publicado en 1954, señala: “…cuando el elemento humano había llegado a alcanzar un número apreciable…la autoridad eclesiástica, con el consentimiento del Vice-Patrono Regio, procedía a desmembrar el respectivo sitio de la parroquia a que hasta entonces había pertenecido y a erigir en cabecera de un nuevo curato, cuyo territorio parroquial era señalado en el auto de erección.”. (p. 59). Se aprecia así, lo justa que era la petición hecha por el Obispo Martí, solicitando una parroquia eclesiástica de Cabudare; y, su consideración y erección años más tarde.
Este autor menciona también que: “…Algunas poblaciones se formaron lentamente en un sitio que reunía condiciones favorables a la vida urbana. A veces era un hato o una hacienda…” y continúa “…Sin embargo, la capilla, máxime cuando era atendida de continuo por un sacerdote, constituía un centro de atracción para el elemento humano, por lo que no podemos menos que reconocerle su papel de núcleo formativo de algunas poblaciones…”. (p. 58–59).
El primer párroco de la nueva parroquia eclesiástica de Cabudare fue Juan de Mujica o Muxica
Por su parte, el historiador Arístides Medina Rubio escribió un artículo en la Revista de Historia y Ciencias Sociales Tierra Firme en 1997, titulado Las Parroquias en la Historia de las Ciudades, donde señala: “…la iglesia al implantarse en América, asume a sus pobladores y los territorios como una gran feligresía…que debe ser dividida en Diócesis, bajo la administración de un Obispo, y parroquias bajo la administración de un párroco. La parroquia es por tanto una entidad corporal y territorial creada por la Iglesia…” (p. 392)
Ambrosio Oropeza en su libro Historia Territorial de los Estados Lara y Yaracuy, publicado en 1946, destaca la importancia de la parroquia religiosa al señalar:
Durante la época colonial podemos decir que no existió otra división político territorial en el territorio venezolano que la que servía de base para distinguir las distintas provincias y la que señalaba las jurisdicciones de las diversas ciudades. Hemos dicho en Nuestra Historia Orgánica de Venezuela que en la referida época no existía la cédula territorial llamada Parroquia Civil, sino que a las parroquias eclesiásticas se les nombraba funcionarios para la administración civil. (p. 3)
Es decir, que durante la colonia no existían parroquias civiles, sólo religiosas. Cuando se consolidó la independencia de Venezuela y se creó la Gran Colombia; en la Constitución de 1821, todas las parroquias religiosas creadas durante la colonia, incluyendo Cabudare, que había logrado esta jerarquía en 1818, fueron transformadas en parroquias civiles,
Por lo tanto, se destaca la importancia de las parroquias religiosas en la organización del territorio y como núcleo aglutinador de población, y la parroquia eclesiástica de Cabudare es un ejemplo que valida ese planteamiento.
De igual manera, no hay que olvidar el papel que tuvieron algunos vecinos, entre ellos, Don Juan de Ponte, Don Antonio Marante, Don Antonio García Tacoronte y Don Miguel Bernal, y otros, que desde los espacios civiles, impulsaron la propuesta del Obispo Martí y apoyaron la construcción de la iglesia, cediendo el terreno y garantizaron su sostenimiento económico por varios años. Favoreciendo así, el establecimiento y crecimiento de esta población. El primer párroco de la nueva parroquia eclesiástica de Cabudare fue Juan de Mujica o Muxica.