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El Lechuguero, mítico personaje de Cabudare

 

Luis Alberto Perozo Padua
Periodista


Antes de despuntar la aurora, ya José Natividad Cañizalez Falcón, popularmente conocido como ‘El Lechuguero’, se preparaba para atender el huerto familiar

Naci­do en Humo­caro Alto el 8 de sep­tiem­bre de 1935, radicán­dose en Cabu­dare en 1951, cuan­do “los viejito+s” (Aure­liano y Juan Anto­nio) bus­can­do un mejor por­venir deci­dieron tomar un auto­bús y com­prar una casona (la Nº 21) en la calle San Rafael con Miguel Bernal, en pleno cas­co histórico. 

José Nativi­dad se enfren­tó des­de joven “al qué dirán” al repu­dio gen­er­al por su com­por­tamien­to “inde­sea­do” para la sociedad, pues se enteró en la puber­tad, que su condi­ción sex­u­al no era de su sim­patía, o mejor dicho, del agra­do del entorno. 

Eran años duros para José Nativi­dad, que con el paso del tiem­po, acep­tó vivir entre la burla y el rechazo. 

Conocedor del arte de sembrar

Estudió has­ta segun­do gra­do en Humo­caro y a pesar que no le favore­ció la acad­e­mia, José Nativi­dad conoce a la per­fec­ción las esta­ciones según la luna, recur­so que aprendió para ten­er éxi­to en el ofi­cio que habría de emprender.

Con­tiguo a su vivien­da, comen­zó cul­ti­van­do lechuga, cilantro, pere­jil y pimen­tón, entre otros rubros que vendía en el mer­ca­do pop­u­lar de Cabudare. 

Con el cor­rer de los años, ‘El Lechuguero’ se espe­cial­izó en la siem­bra de plan­tas med­i­c­i­nales y no había quien no lo vis­i­tara a la hora de un padecimiento. 

Los bot­i­car­ios de la época con­cur­rían al huer­to de José Nativi­dad a adquirir parte de sus plan­tas, así como com­er­ciantes de ori­gen asiáti­co que perseguían la mostaza y la alba­ha­ca, para la reventa. 

José Nativi­dad “El Lechuguero”, murió e su queri­da Cabu­dare el 21 de diciem­bre de 2015

“El Lechuguero” con­sigu­ió que un tío vendiera parte de sus cul­tivos en el antiguo Mer­ca­do El Man­te­co, dinero que uti­liz­a­ba para la sub­sis­ten­cia de él y sus famil­iares directos. 

Entre lo cura­ti­vo y la pop­u­lar­i­dad 

José Nativi­dad ya no cul­ti­va por la edad, o mejor dicho, es poco lo que siem­bra para vivir, pero aun recuer­da el agrad­able aro­ma matuti­no del romero, el poleo, el llan­tén, la artemisa, el mal­o­jil­lo, el ore­ganón y la yerbabuena.

Cuan­do se le inquiere si se casó algu­na vez, responde tajante: Nun­ca. Cam­i­na diari­a­mente el cen­tro de Cabu­dare y salu­da a todo el mun­do, pues es tan cono­ci­do como la plaza Bolí­var y la cei­ba en donde acam­pó el Libertador. 

El 21 de diciem­bre de 2015, la infaus­ta noti­cia de su fal­l­ec­imien­to cor­rió ráp­i­da­mente entre los moradores de Cabu­dare. Ese día no hubo funerales, ni mucho menos hom­e­na­je alguno, aunque se podía res­pi­rar el luto por la par­ti­da de este per­son­aje pop­u­lar y más allá, mítico.

http://elimpulso.com/articulo/el-lechuguero-mitico-de-cabudare#

El Lechuguero recorre diari­a­mente el cen­tro de Cabu­dare, para vender sus “mat­i­cas” curativas

CorreodeLara

Esᴛᴀ́ ᴜsᴛᴇᴅ, ᴅɪsᴛɪɴɢᴜɪᴅᴏ ʟᴇᴄᴛᴏʀ, ᴇɴ ᴛᴇʀʀɪᴛᴏʀɪᴏ ᴅᴇ ʜɪsᴛᴏʀɪᴀ, ᴅᴇ ʜᴏᴍʙʀᴇs ᴄɪᴠɪʟɪsᴛᴀs, ʏ sᴏʙʀᴇ ᴛᴏᴅᴏ, ᴅᴇ ɢʀᴀɴᴅᴇs ᴀᴄᴏɴᴛᴇᴄɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ϙᴜᴇ ᴍᴀʀᴄᴀʀᴏɴ ᴜɴ ʜɪᴛo

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