Encomiendas otorgadas por Juan de Villegas en el Valle de Las Damas

Mario R. Tovar G
Historiador y escritor

“(…) No se molestan en estu­di­ar la his­to­ria de los pueblos 
(…) tam­poco lo hacen en relación con el perío­do de conquista 
y col­o­nización de los valles de Buría, Yaracuy y Barquisimeto (…)”. 
Ramón Querales.
(2003; p.173).-

Tras la fun­dación de la ciu­dad de Nue­va Segovia de Buría (Bar­quisime­to) en 1552, le cor­re­spondió a Juan de Vil­le­gas, como gob­er­nador de la Provin­cia de Venezuela, asig­nar 239 encomien­das entre los con­quis­ta­dores de la ciu­dad, de las cuales 48 cor­re­spondieron al Valle de las Damas, región perteneciente en la actu­al­i­dad al esta­do Yaracuy.

Para la remo­ta fecha existían numerosas aldeas indí­ge­nas, según datos apor­ta­dos por el fal­l­e­ci­do cro­nista de Bar­quisime­to Ramón Querales, en su impor­tante obra tit­u­la­da: “La Comar­ca Man­cil­la­da”, de las cuales tomó 15 de ellas habitadas por unos 2091 aborí­genes, ubi­ca­dos en el cita­do valle, para realizar el estu­dio demográ­fi­co de la juris­dic­ción de Nue­va Segovia.

Aho­ra bien, según reseña el cro­nista, la región esta­ba den­sa­mente pobla­da a la lle­ga­da de Nicolás de Fed­er­man en 1530, gra­cias a las exce­lentes condi­ciones geográ­fi­cas exis­tentes, tal como abun­dan­cia de aguas, tier­ras fér­tiles, flo­ra y fau­na diver­sa; en con­se­cuen­cia, rica en ali­men­tos veg­e­tales y ani­males, plan­tas med­i­c­i­nales, facil­i­dad para las comu­ni­ca­ciones con otros ter­ri­to­rios del país, exce­lente cli­ma y cic­los plu­viales reg­u­lares prop­i­cios para la vida en el Valle de las Damas, nom­bre dado por la gente de Federman.

 

En tal con­tex­to, en la aldea de Iboa Vil­le­gas dio 04 encomien­das a Her­nan­do Madrid, a Pedro Hernán­dez y para él, con un total de 633 indígenas.

En el pueblo de Aritibare otorgó 02 encomien­das con 60 aborí­genes a Diego Bra­vo; en Guayde asignó 02 encomien­das a Pedro Fer­nán­dez y a Cristóbal López, con 180 indígenas.

En Yacurib­a­coa otorgó 02 encomien­das a Diego de Orte­ga con 84 aborí­genes; en Mahorán asignó 02 encomien­das a Gon­za­lo de los Ríos y a Pedro Bil­tre, quienes reci­bieron 174 indígenas.

En Yaguaraba­ri­na dio 02 encomien­das a Diego Gar­cía y a Juan Gar­cía, quienes reci­bieron en total 354 aborígenes.

En Gua­ma otorgó 02 encomien­das a San­cho Briceño y a Sebastián Gon­sales, con 177 indí­ge­nas; en Guayure­bo, dio 01 encomien­da con 57 indí­ge­nas a Fran­cis­co Sánchez de Utr­era; en Sua­nia, entregó 01 encomien­da con 42 aborí­genes a Este­ban Martín.

En Yaguarabare otorgó 01 encomien­da a Diego Fer­nán­dez con 87 indí­ge­nas; en Yacurib­a­coa asignó 01 encomien­da a Este­ban Martín con 51 indí­ge­nas; en Yaro­ca­bana dio 01 encomien­da con 51 a Diego Bra­vo; en Bari­care asignó 01 encomien­da con 111 aborí­genes a Bar­tolomé de Hermosillo.

En Dib­oraba­coa, dio 01 encomien­da a Vas­co Mos­quera con 87 indí­ge­nas y en Bacoro­da asignó 01 encomien­da con 39 aborí­genes a Pedro Bil­tre, respectivamente. 

Final­mente, Juan de Vil­le­gas asignó la may­or parte de las 239 encomien­das en Nir­gua y la menor en Aroa, aldea más despobla­da de la región.