Eustoquio Gómez encarceló a Pastor Oropeza en las Tres Torres
Juan José Peralta
Cuentan que de pequeño a Pastor Oropeza le angustiaba la salud de los otros niños de su Carora natal, angustia que de médico lo convirtió en iniciador de la atención materno infantil en los hospitales de Venezuela. Había nacido el 12 de octubre de 1901.
Al terminar bachillerato se fue a estudiar a Caracas donde se doctoró en 1924 en Ciencias Médicas en la Universidad Central de Venezuela y de vuelta al terruño en 1925 trabajó en el hospital San Antonio de Padua y escribía artículos médicos para El Diario de Carora y El Universal.
Estudiaba Medicina en la UCV pero su alta sensibilidad social aunada a las ideas democráticas le costaron su detención en 1921 por apoyar y participar en la huelga de los tranviarios de Caracas.
Después de ejercer la medicina por varios años en su Carora natal y consciente de la necesidad de ampliar y profundizar sus conocimientos para beneficio de sus pacientes, Pastor Oropeza se fue en 1926 a París donde se recibió de Médico Colonial en La Sorbona.
A su regreso en 1930, el arbitrario tirano regional general Eustoquio Gómez lo acusó de traer y promover la proscrita ideología comunista y ordenó encarcelarlo sin razón en la cárcel pública, llamada las tres torres, de donde salió al año siguiente para casarse con su coterránea Egilda Herrera Gutiérrez con quien procreó cuatro hijos. Por su vocación docente, en esa misma época fue designado subdirector del Colegio Federal de Carora.
En 1934 volvió a Francia en compañía de su paisano Agustín Zubillaga y hace un post grado en pediatría en el hospital “des Enfants Malades” y en 1935 publicó su libro El Niño con las experiencias de sus años de ejercicio y estudios. En 1936 el sabio venezolano Enrique Tejera, ministro de Sanidad, lo llama para que ponga en práctica sus propuestas en el nuevo despacho de la salud creado por el presidente Eleazar López Contreras. ..
Pastor Oropeza creó allí la novísima división materno infantil y redacta el decreto de creación del Consejo Venezolano del Niño para atender necesidades y problemas de la población infantil. En su obra de esa época también destaca el hospital municipal de niños de Caracas, ahora J. M. de los Ríos, el más importante centro médico infantil del país y uno de los más reconocidos en América Latina.
También promueve la cátedra universitaria de pediatría, del Instituto Nacional de Puericultura y la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría. Como decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela creó el post grado en pediatría.
Además de contribuir con la salud infantil en Venezuela, Pastor Oropeza incursionó en el ámbito político, fue diputado al Congreso Nacional por el Distrito Federal, entre 1941 y 1945 y Senador por el estado Lara en 1945.
En 1953 fue destituido de la universidad por desacuerdo con los cambios ordenados por el general Marcos Pérez Jiménez y de nuevo por sus convicciones democráticas estuvo preso y salió en libertad el 23 de enero de 1958 con la caída de la dictadura perezjimenista.
Antes de su boda tuvo con Agueda del Carmen Mujica a su hijo Héctor Mujica, periodista, político y filósofo quien fue dirigente del Partido Comunista de Venezuela, profesor y director de la Escuela de Comunicación Social de la UCV y docente de varias generaciones de periodistas, entre quienes me encuentro.
Pastor Oropeza dejó un importante legado de más de cien títulos entre libros, ponencias y artículos, donde resume sus preocupaciones sobre protección infantil y enfermedades de los niños, parte de su reconocida labor científica.
En 1964 el Gobierno creó el Premio Pastor Oropeza al mejor trabajo en Pediatría y son numerosas las promociones médicas y paramédicas con su nombre. Fue individuo de número y presidente de la Academia Nacional de Medicina (1976–1978), profesor Honoris Causa de la Universidad de los Andes, Miembro Honorario de Sociedades Médicas Nacionales e Internacionales y de Pediatría en Chile, Uruguay, Argentina, México, Colombia, Cuba y Bolivia.
En 1988 por iniciativa del Ministro de Sanidad, fue instituida la medalla de la Salud Pastor Oropeza, para galardonar a los servidores de la salud pública Venezolana. Varios hospitales llevan el nombre de Pastor Oropeza, uno en Carora y el del Seguro Social en Barquisimeto, ciudad donde murió el siete de septiembre de 1991, próximo a cumplir noventa años de fecunda labor por la madre y el niño.