La “concreción calcárea” extraída al Libertador
José Felipe Pérez Padilla
Investigador y catedrático de la Facultad de Medicina de la UCV
Alejandro Próspero Réverénd (1796- 1881) entrega al presidente Antonio Guzmán Blanco la concreción calcárea extraída de uno de los pulmones del Libertador Simón Bolívar en 1847.
Al fallecer el Libertador en Santa Marta, Colombia en 1830, el médico francés, realizó la autopsia, extrayendo un “concreción calcárea” del tamaño de una avellana, la que guardó y posteriormente y obsequia al presidente Guzman Blanco al visitar a Venezuela.
“…En 1847, Revérénd es invitado a que venga a Venezuela por el Ilustre Americano, general Guzmán Blanco. El ilustre galeno acepta la deferencia del presidente de la República, y en el mes de marzo de ese año, ya Revérénd se halla en Caracas, donde es recibido apoteósicamente. El día 27 del mismo mes de marzo, hace llegar al general Guzmán el cálculo extraído de uno de los pulmones del Libertador, en la autopsia hecha de su cadáver.
‘Al visitar la ciudad natal del Libertador Simón Bolívar ‑dice Revérénd en la misiva dirigida al general Guzmán‑, y hallándome en edad muy avanzada, debo desprenderme de una prenda de inestimable aprecio que poseo, para presentarla al Gobierno de esta República, única llamada a reservarla después de mis días. Esta prenda es una concreción fosfática calcárea, hallada por mí en uno de los pulmones del Libertador al verificar la autopsia de su cadáver”.