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La Mesa Alemana y la lista negra en Barquisimeto

Omar Garmendia
Cronista y escritor

La Lista Negra era una nómina de firmas y personas creada por los gobiernos norteamericano e inglés, donde figuraban los nombres pertenecientes o sospechosos de pertenecer a ciudadanos de sus países enemigos, especialmente Alemania, y con las cuales se prohibía toda clase de contacto financiero y comercial


En Bar­quisime­to exis­tió un club que fre­cuenta­ba la colo­nia ale­m­ana en nues­tra ciu­dad. Hay dudas entre algunos cro­nistas sobre la fecha de su fun­dación, entre prin­ci­p­ios del siglo XX y 1922. Estas con­tro­ver­sias sur­gen debido a cri­te­rios doc­u­men­tales inespecí­fi­cos que los cro­nistas uti­lizaron, repi­tien­do his­to­rias que se divul­ga­ban en obras que no cita­ban las fuentes doc­u­men­tales, lo que imposi­bil­ita­ba la ubi­cación de la infor­ma­ción correcta. 

De acuer­do con Ful­gen­cio Orel­lana (1990), La Mesa Ale­m­ana era un cen­tro de reunión de los emplea­d­os de la casa Blohm y Cia., fir­ma estable­ci­da en Bar­quisime­to a finales del siglo 19, lo que puede dar una idea de la fecha en que fue fun­da­do dicho club.

Raúl Azpar­ren (s/f), afir­ma que fue estable­ci­da en 1922 y ofrece detalles de los fun­dadores, quienes eran altos emplea­d­os de Blohm: H. Thor­manhlem, William Riehl, H. Thiel, W. Flor y Max Eck­stein. Más tarde se agre­garon E. Schoe­noe­gass, Bernar­do Sydow, J. Van Belen y William. B. Tay­lor (que no era alemán, sino curazoleño).

Asimis­mo, Fran­cis­co Cama­cho, en entre­vista (2003) al alemán Rudolf André, lle­ga­do a Bar­quisime­to como miem­bro de la trip­u­lación de un buque petrolero norteam­er­i­cano de la Stan­dar Oil Com­pa­ny, retenido en Venezuela has­ta el cese del con­flic­to béli­co, refiere que otros miem­bros eran Ernesto Blohm, Hen­ry Lam­mers, Gün­ter Lemke y Max Eckstein.

Crea­da como un cen­tro de recreación y esparcimien­to, en este club (situ­a­do en una esquina de la car­rera 19 con la calle 28, diag­o­nal al antiguo Beco, hoy Cen­tro Com­er­cial Social­ista I), se conocieron por vez primera los jue­gos de ten­nis y la primera can­cha de boliche (bowl­ing) de nueve palos, así como el bil­lar y jue­gos de mesas.

En entre­vista pub­li­ca­da por el peri­odista Fran­cis­co “Lar­ry” Cama­cho en mar­zo de 2003 al señor Ernest Simo­nis, ciu­dadano alemán, ejec­u­ti­vo de la agen­cia auto­movilís­ti­ca Auto Unión BKW y quien había lle­ga­do a Bar­quisime­to en 1937, tes­ti­mo­nia que la Mesa Ale­m­ana servía tam­bién como res­i­den­cia y dor­mi­to­rio para algunos tra­ba­jadores de Blohm, como los señores Sydow, Bure­gard, Lemnke, S’seguiz, Eschoenogass de lo que se desprende que era un club sin for­mal­is­mos como lo tenían otros de la ciudad.

Se bebía cerveza ale­m­ana, se juga­ba a las car­tas y se escuch­a­ba y se toca­ba músi­ca ale­m­ana con acordeón, batería, vio­lín, piano, sin­fonía o armóni­ca, como por ejem­p­lo la que com­pu­so Her­mann Lons:  Ada Du Mein Lieb Vaber­land. Había comi­da ale­m­ana enlata­da de ese país y se real­iz­a­ban bailes folk­lóri­cos como el vals vienés Die Blave Donau (El Danu­bio Azul), Der Schittschu­len­fer (Los pati­nadores), Gets­chiten Aus Dem  (Cuen­tos del bosque de Viena).

 Cuan­do estal­ló la II Guer­ra Mundi­al muchos de los ale­manes que había en Bar­quisime­to, no sólo los emplea­d­os de Blohm, sino otros que eran mecáni­cos y agricul­tores, debieron irse de la ciu­dad para ocul­tarse de la lla­ma­da Lista Negra, exten­di­da por todo el mun­do, por temor a ser persegui­dos y toma­dos como agentes de Adolf Hitler.

Var­ios de los emplea­d­os de Blohm de Bar­quisime­to se mar­charon y debieron ocul­tarse en Boconó, esta­do Tru­jil­lo. Por este moti­vo, La Mesa tuvo que cer­rar en 1939. Aunque no se tiene certeza del año de cierre de las fun­ciones de la mesa Ale­m­ana, el alemán Rudolf André, ase­gura­ba que cer­ró en 1945, luego de la clausura del Club Alemán de Cara­cas y la inclusión de los miem­bros por sospe­chas de pertenecer a la Lista Negra


Bib­li­ografía consultada
Azpar­ren, Raúl (S/F). Bar­quisimetanei­dad, per­son­ajes y lugares. Bar­quisime­to.
Cama­cho, Fran­cis­co (2007). Redes, élites y poder social en Bar­quisime­to. El Club del Com­er­cio 1941–1958. Bar­quisime­to: UCLA. Edi­ciones del Rectorado.
Orel­lana, Ful­gen­cio (1990). Apuntes para la memo­ria de la ciu­dad. Bar­quisime­to.

Omar Garmendia

Escritor. Ensayista. Cronista de libre ejercicio. Profesor Titular UCLA, Doctor en Educación y Magister Scientiarum en Lingüística blogculturaomar.blogspot.com

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