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Mary Calcaño, la primera aviadora venezolana (+FOTOS)

Alejandro Irausquín
Ing. Aeronáutico, IUPFAN 1991
Miembro de LAAHS
www.facebook.com/alejandro.irausquin
alejandro.irausquin@gmail.com
@airausquin

Mi agradec­imien­to al Sr. Fabián Capecchi 
y la Srta. María Angeli­na Keel­er, nieta de Mary Calcaño, 
por su asis­ten­cia para la elab­o­ración de este artículo

(A nuestra primera y competente Aviadora Venezolana, señorita Mary Calcaño, con motivo de su primer viaje, en su avioneta, a esta su tierra natal, donde fue recibida por todos, con gran demostración de cordialidad y simpatía. ‘El Luchador’ Feb. 23, 1940)


En sep­tiem­bre de 1908, la avi­ado­ra france­sa Thérèse Pelti­er (1873–1926) se había con­ver­tido en la primera mujer en pilotear una aeron­ave más pesa­da que el aíre, en Italia, a los man­dos de un biplano Voisin perteneciente a Dela­grange. Blanche Scott fue la primera mujer en volar un solo en un aero­plano el 2 de sep­tiem­bre de 1910. Har­ri­et Quim­by fue la primera mujer en obten­er una licen­cia de pilo­to. Para 1930, había unas 200 mujeres pilo­tos y, para 1935, había entre 700 y 800 mujeres pilo­to con licencia.

 


Mary Cal­caño, la primera avi­ado­ra venezolana

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

María Asun­ción Cal­caño Ruiz (Agos­to 15, 1906 – Noviem­bre 17, 1992) tam­bién cono­ci­da como Mary Cal­caño y como Mary Keel­er, por su apel­li­do de casa­da, se graduó de pilo­to avi­ador en Noviem­bre de 1939, en Roo­sevelt Field, Long Island (otra fuente men­ciona el North Beach Air­port), obte­nien­do su licen­cia de pilo­to pri­va­do No. 73.550 de la Civ­il Aero­nau­tics Author­i­ty  de los Esta­dos Unidos de Améri­ca (ante­ceso­ra de la actu­al FAA) el día 13 de dicho mes, con­vir­tién­dose con ello en la primera mujer pilo­to de Venezuela. El día 6 de Diciem­bre de ese mis­mo año le es emi­ti­do el Cer­ti­fi­ca­do de Apti­tud de Pilo­to Pri­va­do fir­ma­do por el coro­nel Isaías Med­i­na Angari­ta, para el momen­to Min­istro de Guer­ra y Marina.

Mary Cal­caño nació en Ciu­dad Bolí­var. A sus 14 años en un paseo a Los Castil­li­tos, en el camino de La Guaira, se quedó extasi­a­da con­tem­p­lan­do el paisaje de Cara­cas y proclamó “algún día volaré sobre Cara­cas en un avión pilotea­do por mí…”.

Se desem­peñó como tra­duc­to­ra, vende­do­ra y direc­to­ra de pub­li­ci­dad de John Stub­bins Co., rep­re­sen­tantes de las avione­tas Piper Cub en Cara­cas. Fue envi­a­da por esta empre­sa a Nue­va York a unos cur­sos de per­fec­cionamien­to y según un artícu­lo del boletín “The Cub Fli­er” esto le motivó a decidirse a volar, de modo de poder demostrar las aeron­aves. Para ello adquir­ió tam­bién un avión Piper J‑4A Cub Coupe, de 65hp, ser­i­al 4–676, orig­i­nal­mente reg­istra­do NC24668, cuar­to avión pri­va­do de Venezuela. 

Mary escogió el avión en col­or amar­il­lo, pues era el úni­co col­or que sopor­taría la inclemen­cia del Sol trop­i­cal. La razón para escoger el Cub fue que era lo sufi­cien­te­mente económi­co para resul­tar ampli­a­mente atrac­ti­vo, y porque tenía el per­for­mance requeri­do en un país cuyas mon­tañas alcan­zan 12.000 pies (3.700 met­ros) de altura y cuyos áreas de ater­riza­je eran ‘del tamaño de una servilleta’.

Cal­caño jun­to a su Piper J‑4A Cub Coupe, ser­i­al 4–676, matric­u­las NC24668 y YV-MAC

El mis­mo reporte indi­ca que para el momen­to era ella la ter­cera avi­ado­ra civ­il de Venezuela, incluyen­do al Sr. Stub­bins. El otro sería Guiller­mo Tamayo Rivero, primer pilo­to pri­va­do de Venezuela. “Los Vene­zolanos deben volar” decía Cal­caño, “porque es la man­era más prác­ti­ca de via­jar. ¡Y lo harán!”. Su meta era mostrar­le a sus com­pa­tri­o­tas hom­bres y mujeres que volar era sim­ple y seguro.

Como anéc­do­ta rela­ta Mary Cal­caño que durante el cur­so no era la veloci­dad lo que le impacta­ba, porque los car­ros iban a cien mil­las por hora y ellos en el avión iban a sesen­ta, por lo que los car­ros les pasa­ban. En su primer solo se sin­tió “como aban­don­a­da” por la ausen­cia del instruc­tor, y al momen­to de ater­rizar, un camión incur­sionó en la pista, tenien­do que subir de nue­vo, con sus­to, más por el temor a que la regañasen que por miedo a matarse.

MariaCalcañoEnCiudadBolivarElLuchadorEn su regre­so a Venezuela, en el mis­mo año 39, dado que no tenía sufi­cientes horas de vue­lo y por lo tan­to no le per­mitían eje­cu­tar la larga nave­gación entre los Esta­dos Unidos y su país, se tra­jo su Cub embal­a­do vía marí­ti­ma. Su Sra. Madre, al ver aque­l­lo le pre­gun­tó: “Mija, ¿Qué traes allí? ¿Una casa?” a lo que respondió: “No mamá, un avión…” provocán­dole casi un ‘yeyo’. Con este avión vis­itó todo el país.

En enero de 1940 visi­ta con su aeron­ave la ciu­dad de Mara­cai­bo. En Febrero visi­ta con su aeron­ave su tier­ra natal, Ciu­dad Bolí­var. En abril el Diario El Uni­ver­sal repor­ta sobre la gran aflu­en­cia de gente que lle­ga de Cara­cas, Valen­cia, y de todas partes del país, para pres­en­ciar los vue­los en el ‘Cam­po de Aviación Civ­il’, en espe­cial los real­iza­dos por Mary Calcaño.

Fue fun­dado­ra de Ala Vene­zolana, la primera Aso­ciación de Pilo­tos Civiles Vene­zolanos, en Cara­cas, 1941. Igual­mente fue fun­dado­ra del Aero­club Cara­cas, y de la primera escuela de aviación civ­il pri­va­da, lla­ma­da Ser­vi­cios Aére­os C.A., SACA, ambos en La Car­lota, en 1946, donde ofrecía sus ser­vi­cios aére­os, jun­to con pilo­tos como Guiller­mo Pacanins, Alber­to Yanez, Har­ry Gib­son y Guiller­mo Ochoa.

Después de ella se grad­uarían las vene­zolanas Car­oli­na Her­rera de Moli­nari a fines de 1941 en los Esta­dos Unidos de Améri­ca; y en Venezuela, Ana Luisa Branger de Mc Gill, en Mara­cay en Julio de 1942 (la primera que obtiene sus alas de pilo­to en el país) y Luisa Ele­na Con­tr­eras, en Mara­cay en 1943.

Miem­bros del Aero­club Cara­cas, jun­to a Mary Calcaño

En noviem­bre de 1941, se con­vierte en la primera mujer pilo­to civ­il que ater­rizó en la base mil­i­tar de Day­ton, Ohio (Hog­ar de los her­manos Wright), encabezan­do un pequeño grupo de avi­ado­ras lla­madas las ‘Pud­dle Jumpers’, encar­ga­dos de despachar aeron­aves para cubrir las órdenes del gob­ier­no, en esen­cia aviones Piper L4, la ver­sión civ­il del Piper J‑3 Cub, aeron­aves que pasarían a unirse al ‘Grasshop­per Squadron’ (Escuadrón Salta­montes), para misiones de correo, obser­vación y enlace. Para ese momen­to Mary se encon­tra­ba de vaca­ciones en los Esta­dos Unidos y relató que William T. Piper “me pre­gun­tó si yo quería hac­er un vue­lo, trasladan­do aviones a Day­ton, y le dije que ‘Si’.”

Su nom­bre y sus alas están (jun­to con las de Jorge Mar­cano) en el ‘Muro de los Avi­adores’ (‘Famous Fly­ers Wall’), un muro de bronce con las alas de los avi­adores famosos, ubi­ca­do en el Atrio de la Capil­la St. Fran­cis, en River­side, Cal­i­for­nia, des­de ese día 13 de Diciem­bre de 1941.

Luego de var­ios días de retra­so debido al mal tiem­po, el jueves 13 de noviem­bre de 1941 arrib­an a Pat­ter­son Field, cin­co avi­atri­ces con un número igual de Piper Cub, des­de la fábri­ca en Lock­haven, Pa. En la foto, de izquier­da a derecha, el Coro­nel M.G. Estabrook, jr., Mary Cal­caño, Bet­ty Weaver, Mar­cia Court­ney, Clara Danis y Dot McLean

En una entre­vista por Car­men Clemente Travieso, para el diario El Nacional pub­li­ca­da el 12 de Enero de 1949, rela­ta:  “A veces he vola­do sola. Otras acom­paña­do (sic) con el mecáni­co, Anto­nio Reyes Car­val­lo, pop­u­lar­mente cono­ci­do por ‘el indio Reyes’, hoy mecáni­co de Con­stel­la­tions…”.  “Pero lo más diver­tido fué lo que me pasó en un pueblecito de Venezuela. Ibamos en avión a una tern­era, y yo me perdí en la ruta. Ater­ricé en un lugar donde había un ran­chi­to. La campesina cor­rió deses­per­a­da casa del esposo y le gritó: ‘Hermenegildo, llegó un pájaro con una bru­ja…’ Cuan­do le ped­i­mos la direc­ción, nos dijo “Po’ay pa’bajo…” Y lleg­amos direc­ta­mente –con­cluye Mary rien­do la ocurrencia.”

Anto­nio ‘el indio’ Reyes Car­val­lo, con répli­ca del Cau­dron G.III en el Museo Aeronáu­ti­co de la Fuerza Aérea Venezolana

Su pop­u­lar­i­dad y el hecho de ser de Ciu­dad Bolí­var fue tal que pasó a ser un per­son­aje en la nov­ela “La casa flotante” de Rafael Pine­da, ganador de la Bien­al de Lit­er­atu­ra José Anto­nio Ramos Sucre, en 1970. Ya de may­or edad, hacia la déca­da de los 80s, con su hijo John sigu­ién­dole los pasos como pilo­to, rela­ta que se desprendió del que era su avión para com­prarse un piano (La músi­ca le venía de famil­ia), ya que era una meló­mana “deses­per­a­da” y quería prepararse para la vejez. Mary Cal­caño gusta­ba de inter­pre­tar a Bach. María Cal­caño Ruiz murió el 17 de Noviem­bre de 1992 a la edad de 86 años, dejan­do una huel­la imborrable en la his­to­ria de la aviación civ­il Vene­zolana.

Parte de su his­to­rias han queda­do recopi­la­dos en diver­sas entre­vis­tas en medios de comu­ni­cación impre­sos, var­ios de ellos disponibles en la red,  y muchos de los cuales for­man parte del reg­istro crea­do por su nieta, Maria A. Keel­er, hija de su úni­co hijo John P. Keel­er, y acce­si­ble para deleite de todos en la dirección:

http://www.marikeeler.com/MaryCalcanoRuiz/

Mary Cal­caño en su madurez

Fuentes:
http://www.marikeeler.com/MaryCalcanoRuiz/
http://especiales.el-nacional.com/69aniversario/40s/c_desde-nina-supe-que-queria-volar.html
http://www.icao.int/secretariat/PostalHistory/women_in_aviation.htm

Libro “Vue­lo hacia el pasa­do”, Alfre­do Velez Boza, 1992

CorreodeLara

Esᴛᴀ́ ᴜsᴛᴇᴅ, ᴅɪsᴛɪɴɢᴜɪᴅᴏ ʟᴇᴄᴛᴏʀ, ᴇɴ ᴛᴇʀʀɪᴛᴏʀɪᴏ ᴅᴇ ʜɪsᴛᴏʀɪᴀ, ᴅᴇ ʜᴏᴍʙʀᴇs ᴄɪᴠɪʟɪsᴛᴀs, ʏ sᴏʙʀᴇ ᴛᴏᴅᴏ, ᴅᴇ ɢʀᴀɴᴅᴇs ᴀᴄᴏɴᴛᴇᴄɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ϙᴜᴇ ᴍᴀʀᴄᴀʀᴏɴ ᴜɴ ʜɪᴛo

2 comentarios en «Mary Calcaño, la primera aviadora venezolana (+FOTOS)»

  • Estoy asom­bra­do de Saber que la Primera Pilo­to Pri­va­da de Venezuela Fue una Mujer y me com­place Mucho cono­cer parte de su His­to­ria por este Medio lo Cual estoy Muy Agrade­ci­do y que después de este Hecho fueron muchas Mujeres las Pilo­tos en el Ter­ri­to­rio Nacional.…GRACIAS %…(Por la Información ).
    Gus­ta­vo Silva.
    gs704005@gmail.com.

    Respuesta
  • Me encan­tó este escrito, Mary Cal­caño era pri­ma her­mana de mi abuela, y de mi tía abuela Gra­ciela Rincón Cal­caño, poet­i­sa auto­ra del Him­no a la Vir­gen de Chiquin­quirá y primera mujer min­is­tra de Venezuela. Orgul­losa de mis antepasados.

    Respuesta

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