Cómo era el mayordomo de Simón Bolívar
Emilio Acosta
Historiador
CEO de Venezuela Provincial
El siguiente relato describe cómo era realmente el mayordomo del Libertador según las Memorias de Fernando Bolívar, sobrino de Simón Bolívar
José Palacios fue un esclavo propiedad de la familia materna de Simón Bolívar. Formó parte del servicio doméstico hasta que, en 1807, Simón Bolívar lo escoge como su sirviente personal y lo manumisa posteriormente, acompañándolo hasta su muerte en 1830.
El sobrino de Simón Bolívar, recoge en su obra “Memorias de Fernando Bolívar, sobrino del Libertador” una descripción de este sirviente, cuando después de abandonar sus estudios en EEUU, realiza un viaje a Bogotá en 1828 para visitar a su tío y cita:
«El mayordomo era José Palacios (…). Su color a pesar de que había llevado tanto o más sol que mi tío, se puede decir que se había tostado menos. Sus ojos eran pequeños y azules, como si fuese natural de los polos o países fríos. Su pelo era rubio, aunque muy crespo, robusto y fuerte como un gladiador y tan valiente como los más esforzados militares de aquel ejército que elevó la gloria de la primitiva Colombia, y fue el terror de los españoles, tanto en las pampas de Venezuela como en las frígidas alturas de Cundinamarca, Pasto o Alto y Bajo Perú. Su fidelidad hacia su patrón era ilimitada y le había acompañado en todas las campañas; él disponía del dinero con gran desprendimiento y honradez y exactitud; tan gastador y lujosos como su patrón, poseía las mejores bestias y llevaba las espuelas de oro y riendas de plata, que le habían sido regaladas al Libertador en ciudades del Perú. Nunca usaba sino traje de paisano porque jamás había querido tomar rango militar, aunque muchas veces había peleado con gran valor, sus vestidos eran de lo mejor que se hacía en el país. A pesar de todo eso, que lo distinguía, no sabía leer ni escribir, y jamás se había aplicado a aprender. Se conoce que en él la condición de criado o sirviente no le era desagradable (…) después de la muerte de mi tío, pensó en retirarse al Perú o Guayaquil, pero se quedó en Cartagena con Nicasio y Gregorio y allí murió dicen que por el uso del licor cosa extraña cuando antes se abstenía enteramente de él, más quizá la falta de guía o director y el pesar de no haber podido fomentar el legado que recibió en premio de sus servicios, ocasionó su pesar y el que se entregase a un vicio».
Artículo publicado en Instagram de Venezuela Provincial