CrónicasReportajesTodas Las Entradas

El Culto a María Lionza reina encantada de Sorte

 

Omar Garmendia
Cronista y escritor

Muy cerca de la población de Chivacoa, ciudad de Venezuela situada en el estado Yaracuy, capital del municipio Bruzual, se encuentra la montaña de Sorte. Constituye una de las puertas de acceso al monumento natural María Lionza, deidad aborigen, que, de acuerdo con la leyenda, recorre la montaña cabalgando sobre una danta


Los devo­tos de la Reina le rinden cul­to y cada año miles de pere­gri­nos se encam­i­nan hacia la espesura de la ser­ranía con la inten­ción hac­er­le toda clase de peti­ciones, con el propósi­to de solu­cionar prob­le­mas de amor, salud, tra­ba­jo, poder o riquezas, en prác­ti­cas rit­uales donde el taba­co, la invo­cación a los espíri­tus, las velas, la pólvo­ra y la oración for­man parte del cer­e­mo­ni­al y la litur­gia que se hace con el fin de lograr los favores de la Reina. 

El cul­to a María Lion­za como expre­sión de reli­giosi­dad nat­ur­al, se man­i­fi­es­ta como una activi­dad humana y cul­tur­al sin­créti­ca de cer­e­mo­nias del cre­do católi­co ofi­cial y los rit­uales mági­cos de cul­turas ances­trales diver­sas. La expre­sión cultista a María Lion­za comen­zó a for­marse en el entrete­ji­do cul­tur­al del mes­ti­za­je abori­gen, español y africano, para lle­gar a ser hoy en día una impor­tante man­i­festación cul­tur­al de carác­ter nacional e internacional. 

El Panteón 

La descrip­ción de las Cortes se ha hecho de acuer­do con la impor­tan­cia que des­de el pun­to de vista fun­cional tiene en la estruc­tura de este sis­tema mági­co-reli­gioso. La “Corte Negra” y la “Corte India” rep­re­sen­tan las cortes prin­ci­pales de María Lion­za, pues en ellas se con­ju­gan, jun­to con la “Corte de la Reina”, la trilogía que ha dado ori­gen a ritos en el mar­co de un gigan­tesco tra­ba­jo espir­i­tu­al y que le da per­fil a uno de los más intere­santes aspec­tos de nues­tra cul­tura y nues­tra iden­ti­dad cul­tur­al como lo es el mes­ti­za­je y las razas que reivindican. 

En la Corte de la Reina, María Lion­za se hace acom­pañar por un com­pli­ca­do con­jun­to de espíri­tus y sus her­manas: la reina Isabel y la reina Guiller­mi­na; el portero Fran­cis­qui­to; la niña Tere­sa y las niñas de la Pal­ma y de la Flo­ra; sus cri­a­dos Juan el Grandote y Eze­quiel y las damas de hon­or Enri­quet­i­ca y Mariana. 

En la Corte India se dis­tinguen los caciques e indí­ge­nas más recono­ci­dos en nues­tra his­to­ria como Mara, Guaicaipuro, Yoro­quí, Para­ma­coni, Yaguari, Cha­cao, Chi­cu­ra­may, Yaracuy, Soro­caima, Man­au­re, Tere­paima, Indio de la Paz, Indio Can­dela, Indio Siete Puñales, Yora­co, las indias Rosa y Tibisay, entre otros. Esta Corte se car­ac­ter­i­za por el conocimien­to de la nat­u­raleza, la curación por las yer­bas, el uso del aguar­di­ente, el puñal y las velas. 

La Corte Negra
A la Corte Negra pertenecen el Negro Felipe, Negro Primero, Negro Miguel, la Negra Fran­cis­ca, la Negra Matea y las Siete Poten­cias Africanas. La Corte Africana aparece den­tro del pan­teón de María Lion­za durante las décadas de los años 50 y 60, cuan­do ingre­san al país san­teros proce­dentes de Cuba y se inte­gran a las prác­ti­cas reli­giosas vene­zolanas. Está con­for­ma­da por las Siete Poten­cias, las cuales son: Eleguá, Olofi, Yemayá, Changó, Ochum, Obatalá y Babalú Ayé.

La Corte Celes­tial está integra­da al pan­teón de la Reina y con­tiene en su may­oría ele­men­tos e iconos católi­cos e incluye den­tro de ella a María Lion­za, a Dios Todopoderoso, al Corazón de Jesús, a las Tres Div­inas Per­sonas, a Cristo Cru­ci­fi­ca­do. Esto es posi­ble porque en los sis­temas mági­co-reli­giosos sus ele­men­tos son alta­mente per­me­ables y flex­i­bles den­tro de la espon­tanei­dad y fun­cional­i­dad de los creyentes.

La Corte Lib­er­ta­do­ra o Boli­var­i­ana está pre­si­di­da por Simón Bolí­var, secun­da­do por el Negro Primero, úni­co negro con ran­go de ofi­cial en el ejérci­to del Lib­er­ta­dor y que pre­side la Corte Negra. Esta Corte recoge a los prin­ci­pales héroes, próceres y pres­i­dentes venezolanos.

La Corte Med­ica está rep­re­sen­ta­da en el doc­tor José Gre­go­rio Hernán­dez, Luis Razetti, José María Var­gas, don Nicanor Ochoa y el pro­fe­sor Lino Valles, así como otros médi­cos de renom­bre, como el doc­tor Gómez Peña, de Mara­cay, Aragua, médi­co muer­to en 1972 a quien se le atribuyen cual­i­dades sanado­ras, y chamar­reros locales que se han desta­ca­do en su labor en regiones especí­fi­cas del país.

La Corte de los Juanes, serie de per­son­ajes pertenecientes al imag­i­nario vene­zolano, con­for­ma­da por espíri­tus inter­me­di­ar­ios de los domin­ios ilim­i­ta­dos sobre ele­men­tos nat­u­rales. Es la mis­ma corte de los chamar­reros y yer­bateros. For­man parte de esta Corte: Don Juan del Río Yaracuy, de las Aguas, del Bosque, de los Cua­tro Vien­tos, del Taba­co, del Camino, del Odio, del Deses­pero, del Volteo, del Pen­samien­to, del Vien­to, de los Retiros, del Espíritu del Taba­co, del Taba­co, de los Encan­tos, de los Cabrones, de la Calle, de las Lágri­mas, del Humo, de los Bar­ran­cos, de la Luz, del Dinero, de la Suerte, del Monte, del Chap­ar­ro, de los Doc­u­men­tos, de los Can­da­dos, del Desasosiego, de las Car­reras  y otros más.

La Corte India Amer­i­cana, con­for­ma­da por los espíri­tus de indí­ge­nas de Norteaméri­ca, como Pluma Blan­ca, Flecha Rota, Gerón­i­mo, quien jue­ga un papel impor­tante en el desar­rol­lo de las mate­rias, Oso Gris, Toro Sen­ta­do, entre otros.

La Corte Malandra

Com­pues­ta por espíri­tus con­sid­er­a­dos áni­mas mila­grosas en ascen­so. Áni­mas penantes que tuvieron una opor­tu­nidad y que hicieron daño o robaron para dar­le al nece­si­ta­do. Eran per­sonas con poder espir­i­tu­al que en vida tomaron el camino de la dro­ga, el robo y la delin­cuen­cia, y que al morir no esta­ban den­tro de una dis­ci­plina y por los favores con­ce­di­dos al pueblo, su famil­ia o los ami­gos, les fueron dan­do una jer­ar­quía, una ele­vación, por medio de vela­ciones, ora­ciones y rezos que los han lle­va­do a su ascenso. 

Esta corte se ha incre­men­ta­do y ha sido acep­ta­da den­tro del cul­to de María Lion­za. Entre los rep­re­sen­tantes de esta corte fig­u­ran: Machera, malan­dro dro­ga­dic­to, muer­to en tiro­teo con la policía, y cuya tum­ba es vis­i­ta­da diari­a­mente en Méri­da, esta­do Méri­da (Venezuela), por infinidad de per­sonas y su cul­to ha sido incor­po­ra­do al pan­teón de María Lion­za, Ismael Urbane­ja, Luis Sánchez, Luis Virgüez, San­doval, el Chamo Luis, el Chamo Coco, Pedro Sánchez y Yor­man García.

 La Corte Vikinga, espíri­tus cuyos inte­grantes son el Doc­tor (Mis­ter) Vikingo, Mis­ter Erick, el rey Olfa y sus hijas las prince­sas Éri­ka y Andaraona. Se dis­tinguen por hac­er grandes sana­ciones, cura­ciones y opera­ciones. La may­oría las hacen por medio de la Corte Médica. 

Corte de los Yer­bateros, con­jun­to de espíri­tus que tra­ba­jan con yer­bas y bre­ba­jes para efec­tu­ar cura­ciones. Entre sus miem­bros están Apoli­nar Cam­pos, Lino Valles, don Toribio Mon­tañez, Nicanor Ochoa, Domin­go Anto­nio Sánchez, larense que murió en la car­retera de Caro­ra (Venezuela) y se con­sid­era además pro­tec­tor de los choferes.


Fuente bib­li­ográ­fi­ca consultada:
Gar­men­dia, Omar (2012). Dic­cionario de María Lion­za, Visión lex­i­cográ­fi­ca de un mito vene­zolano. Edi­to­r­i­al Académi­ca Española

CorreodeLara

Esᴛᴀ́ ᴜsᴛᴇᴅ, ᴅɪsᴛɪɴɢᴜɪᴅᴏ ʟᴇᴄᴛᴏʀ, ᴇɴ ᴛᴇʀʀɪᴛᴏʀɪᴏ ᴅᴇ ʜɪsᴛᴏʀɪᴀ, ᴅᴇ ʜᴏᴍʙʀᴇs ᴄɪᴠɪʟɪsᴛᴀs, ʏ sᴏʙʀᴇ ᴛᴏᴅᴏ, ᴅᴇ ɢʀᴀɴᴅᴇs ᴀᴄᴏɴᴛᴇᴄɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ϙᴜᴇ ᴍᴀʀᴄᴀʀᴏɴ ᴜɴ ʜɪᴛo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *