El día que bombardearon a Venezuela
Luis Heraclio Medina Canelón
Miembro correspondiente de la Academia de Historia del Estado Carabobo
El 1° de septiembre, se cumple un aniversario más del inicio de la Segunda Guerra Mundial. Las acciones que afectaron a Venezuela durante este conflicto son generalmente desconocidas por nosotros, pese a ser bastantes, entre otras: violación de las aguas territoriales, hundimiento de buques venezolanos por los submarinos, hundimiento e incendio de barcos de alemanes e italianos en Puerto Cabello y combates aeronavales en aguas venezolanas entre los contendientes. Pero quizás el hecho menos conocido de todos es la única vez que territorio venezolano fue bombardeado: el bombardeo de la Isla de Patos
La Isla de Patos es una islita venezolana, ubicada en aguas del Golfo de Paria, a unos cinco kilómetros de la costa de Macuro, prácticamente a medio camino entre la península de Paraguaná y la Isla de Trinidad. Mide 1800 metros de este a oeste y 700 mts. De norte a sur.
Tiene una altura máxima de casi cien metros, lo que la hace un punto estratégico ya que desde su cima se divisa todo el tránsito marítimo en sus alrededores.

Desde hacía muchos años Venezuela reclamaba a la Gran Bretaña la ocupación de esta isla venezolana, ya que los ingleses no reconocían la soberanía venezolana sobre esta insula, ocupada por Gran Bretaña desde 1858, pero en 1942 el gobierno de Isaías Medina Angarita finalmente logra que el Reino Unido reconozca la soberanía nacional sobre ese pequeño pedazo de nuestro territorio, mediante el Tratado de Limitación de Aguas Submarinas del Golfo de Paria y el día 28 de septiembre de 942 se celebra un formal acto en el cual es arriado el pabellón inglés y formalmente es entregada la isla a Venezuela, izándose el pabellón tricolor.
En esos días de la segunda guerra mundial, Estados Unidos había convenido con el gobierno de Venezuela la instalación en nuestro país de tres baterías de cañones de defensa costera, una en Punta de Piedras (Falcón), otra en Guanta y la tercera se instaló precisamente en Isla de Patos (Golfo de Paria), que defendía el estratégico paso de la “Boca del Grande” por donde transitaban cientos de tranqueros que transportaban el petróleo a las refinerías de Trinidad, donde se refinaba el combustible que iba a equipar a la maquinaria de los aliados en los distintos frentes de guerra.
Se debe recordar que en esos tiempos Venezuela era el primer exportador de crudo del mundo y este petróleo venezolano fue factor fundamental para el esfuerzo de guerra de los aliados.

Por el acuerdo entre Venezuela y Estados Unidos, los militares norteamericanos entrenaron a personal del ejército venezolano y las baterías de defensa costera se entregaron al ejército criollo a principios de 1943, que vinieron a conformar la “Batería de Costas Nro. 5”, compuesta por cuatro enormes cañones de 155mm (modelo M‑1918) y una sección de ametralladoras antiaéreas compuesta por cuatro ametralladoras Browining modelo HB2 (la llamada punto 50).
Ahora bien, las aguas del Golfo de Paria son de las más profundas del mundo y por su cercanía a las bases de Trinidad son cientos de kilómetros cuadrados de aguas ideales para la práctica de las maniobras militares para las grandes naves de la marina norteamericana, tales como acorazados y portaaviones. Desde principios de la guerra, los nuevos portaviones venían a esta agua con sus bisoñas tripulaciones a probar el equipo y a entrenar a las noveles tripulaciones aeronavales.

Así las cosas, en junio de 1944 la marina norteamericana envió al portaviones USS HANCOCK, recién botado apenas seis meses antes, a realizar su primer entrenamiento antes de ir al frente de guerra.
Uno de los entrenamientos consistían en prácticas de bombardeo que realizaban los aviones embarcados Curtiss SB2C Helldriver, quienes realizaron lanzamientos de torpedos, bombardeos y ametrallamientos contra unos blancos flotantes que se hacían con unas siluetas que simulaban ser los barcos enemigos. Estos blancos eran bastante falsos y los pilotos los calificaban de “aburridos”.
El 30 de junio, mientras un escuadrón de los Curtiss practicaba, vieron a la pequeña isla y les pareció más real que los blancos flotantes y pensando que era una isla desierta procedieron a bombardearla. En la isla se encontraba la dotación venezolana de la Batería de Costas Nro. 5 que fue sorprendida por el feroz ataque de los bombarderos en picada norteamericanos. Lo que pasó exactamente es un misterio.
Lo poco que se sabe es que los pilotos norteamericanos dijeron que ignoraban que la isla estaba habitada. Hay versiones que dicen que entre los soldados venezolanos hubo bajas, pero los historiadores e investigadores no han podido encontrar los archivos que confirmen tal cosa.
Se sabe que existió un expediente en el Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano sobre las protestas formuladas por nuestra cancillería, pero no ha sido localizado por los investigadores históricos, entre ellos Ramón Rivero Blanco, el investigador más acucioso de la historia naval venezolana.
También hay versiones de que los servidores de las ametralladoras antiaéreas habían contestado el fuego y que uno de los aviones norteamericanos habría sido derribado, pero esto tampoco está corroborado.
Por lo menos en los registros de las naves norteamericanas desaparecidas sobre territorio venezolano, no hay ninguna nave siniestrada ese dia.
De lo que no cabe duda es de que efectivamente la Isla de Patos fue bombardeada por los aviones norteamericanos. Esta es la única vez que durante la segunda guerra mundial nuestro territorio fue atacado y paradójicamente, el ataque fue ejecutado por fuerzas amigas o aliadas. Cosas de la guerra.
FUENTES:
Hernández González, Carlos E. “VENEZUELA EN LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL. GOLFO DE PARIA: DEFENSA CONJUNTA Y PUNTO DE DESENCUENTRO” Revista Mañongo. Universidad de Carabobo. Nro. 41. Vol XXI. Julio-Diciembre 2013
Nieves Croes, Francisco Javier “LA DEFENSA DE COSTAS EN VENEZUELA” Revista Mañongo. Universidad de Carabobo. Nro. 41. Vol XXI. Julio-Diciembre 2013
Océano. “ENCICLOPEDIA OCEANO DE VENEZUELA”. Océano Grupo Editorial, S.A. Barcelona, España 2001
Rivas Rivas, José. “HISTORIA GRÁFICA DE VENEZUELA. EL GOBIERNO DE MEDINA ANGARITA 1941–1945” Tomo II, Centro Editor C.A. Caracas 1989