“El Eco de Morón” ¿primer periódico del municipio Juan José Mora?

Elvis David López Navas 
Miembro Correspondiente de la Academia de Historia del Estado Carabobo
elopez_77@hotmail.com

La his­to­ria del peri­odis­mo y la imprenta en Venezuela es un tema de recur­rente inves­ti­gación. En el caso de Puer­to Cabel­lo, la amplia gama de pub­li­ca­ciones per­iódi­cas gen­er­adas durante el siglo XIX, pone de man­i­fiesto el niv­el cul­tur­al de su sociedad.

Pero, en la veci­na población de Morón, no ocur­rió lo mis­mo; podríamos afir­mar que, la pro­duc­ción peri­odís­ti­ca es aje­na a su his­to­ria. Este caso, aparente­mente asom­broso, no es ais­la­do, porque lo mis­mo pasó con otros ámbitos de interés cultural.

Esa desconex­ión, atribui­da a su medio rur­al, y al alto índice de anal­fa­betismo, según los datos del primer cen­so pobla­cional (1873), parece ten­er un tras­fon­do más com­ple­jo, pues este ais­lamien­to será perenne en var­ios aspec­tos por décadas, mien­tras los fac­tores demográ­fi­cos de algún modo u otro pre­sen­taron cambios.

En Puer­to Cabel­lo, los primeros per­iódi­cos en apare­cer fueron “El Vigía” y “El Plus Café”, en 1825. Luego sal­drán a la luz otros títu­los, todos de cor­ta vida. En tan­to que, en Morón supues­ta­mente va a sur­gir un primer títu­lo a finales del siglo XIX.

 

En la obra de Ali Brett Martínez tit­u­la­da “El Peri­odis­mo y las Imprentas de Puer­to Cabel­lo” (1806–1945), desta­ca una nota del bise­m­a­nario “El Carpin­tero” (1896–1897), donde sin entrar en detalles, da a cono­cer al públi­co en octubre de 1897 la cir­cu­lación de un nue­vo per­iódi­co en la ciu­dad tit­u­la­do “El Dinamo”, cuyo redac­tor es Manuel Martínez; ale­gan­do ser el mis­mo que tam­bién pub­licó “El Eco de Morón”.

Aun cuan­do, no es con­cluyente, el nom­bre de Manuel Martínez, aparece en la redac­ción del bise­m­a­nario de índole políti­co “El Lib­er­al Restau­rador” (1900), jun­to a José Ben­i­to Alvizua; pub­li­ca­do por la Orga­ni­zación Lib­er­al Restau­rado­ra de Puer­to Cabel­lo. Igual­mente, figu­ra en la redac­ción del “Boletín de la Jun­ta de Higiene y Salu­bri­dad” (1908); y muchos años después, quizás, un hijo suyo sea quien diri­ja “La Chis­pa”, un quin­ce­nario de dis­tribu­ción gra­tui­ta que cir­culó para 1940.

Has­ta el momen­to, no es mucho lo que se conoz­ca del tra­ba­jo de Martínez, pero, segu­ra­mente se encuen­tren los datos que com­pleten el cru­ci­gra­ma, de tal vez, sea el primer per­iódi­co en la his­to­ria de Morón; tema si se quiere rel­e­vante, en una población estigma­ti­za­da históri­ca­mente por la bar­barie de las guer­ras civiles del siglo XIX.

Final­mente, descono­ce­mos si existe algún ejem­plar de la fuente cita­da por Brett Martínez (1973), que nos ayude a cor­rob­o­rar la veraci­dad de dicho per­iódi­co. En este caso, nos ade­lan­ta­mos a indicar que, de cer­ti­fi­carse la exis­ten­cia de “El Eco de Morón”, estaríamos frente a un gesto civ­i­lizador fugaz; inex­plic­a­ble­mente abru­ma­do por la incul­tura local, tan­to que, tran­scur­rirá más de un siglo en lle­gar a ter­ri­to­rio mórense, la era tec­nológ­i­ca de las redes sociales, sin cono­cer medio impreso.