El santo hospital de San Lázaro en Barquisimeto
Omar Garmendia
Cronista y escritor
La historia hospitalaria de nuestro país es de vieja data. Se cita especialmente el Hospital de la Provincia de Venezuela de 1535 en Coro, considerado como el más antiguo conocido, así como otros como el de San Pablo y el de Nuestra señora de la Caridad en Caracas. En Barquisimeto, el antiguo hospital de Santiago, levantado casi desde los inicios mismos de la ciudad, se establece en su último y definitivo traslado a partir de 1565 sobre la meseta aluvial frente a la montaña de Terepaima y se estima, cronológicamente hablando, como uno de los primeros en establecerse en Venezuela.
Este hospital estaba situado en la esquina noroeste diagonal a la iglesia de la Concepción, en la llamada calleja de El Tocuyo. No se conoce con certeza la fecha de su fundación y ya era mencionado en 1565. Figuraba con el nombre de Santiago en el primer plano original de la Relación Geográfica de la Nueva Segovia de Barquisimeto con fecha de 3 de mayo de 1579, el cual acompañaba a la descripción que sobre la ciudad de Nueva Segovia de Barquisimeto se hiciera de acuerdo con el informe detallado que envió el Cabildo de ese entonces al Consejo de Indias, en base a una encuesta general ordenada por el rey Felipe II.
El hospital de Santiago ya se le designaba con el nombre de Hospital Real de Barquisimeto y desde el 2 de enero de 1579, como de San Lázaro, cuando le fue adjudicado este nombre. En la Relación Geográfica del citado año, los cabildantes de Barquisimeto informaban que existe en la ciudad “…un hospital el cual hizo un clérigo cura deste pueblo que se llamaba Pedro del Castillo. La advocación es el señor San Lázaro. Dejóle cien pesos y con esta pobreza se sustenta con los réditos dellos”. Como ya se dijo, este hospital estaba situado en la esquina noroeste diagonal con la iglesia de la Concepción, sin embargo, y de acuerdo con la descripción hecha por el catalán Mariano Martí Estadella, obispo de Venezuela, en su visita pastoral del 11 de marzo de 1779, este lo coloca a una cuadra más hacia el oeste, es decir en la hoy carrera 16 entre calles 26 y 27 con el frente hacia la calle 27.
Esta aparente discrepancia de la situación del hospital por parte del señor obispo se debe al punto de partida de la medición de las distancias, tanto del propio hospital como de los templos existentes para esa época. Tal medida se estableció, presumiblemente, no desde la fachada principal del templo como pudiera suponerse, sino desde el altar mayor y el adosado posterior que anteriormente era el espacio destinado al cementerio, que para el momento de la visita del obispo Martí ya había desaparecido y en su lugar existía un osario, formando parte estructural de la iglesia.
Aspecto del hospital
Tenía techo de tejas y viguetas redondas de madera, paredes empañetadas y blanqueadas con cal y patio central rodeado de corredores con piso de ladrillo, uno de ellos unido a la pared de la iglesia del hospital, denominada Nuestra Señora de los Desamparados, con zaguán y puerta principal a la calle. Tenía dos salas de enfermería de 18 varas de largo y 5 de ancho, separadas para hombres y mujeres, seis camas y muebles para el servicio de los enfermos. Para 1768, en una Relación que hace el mayordomo Lorenzo de Anzolas se incluye un croquis o planta del hospital. El obispo Martí afirma que no hay botica ni médico para el hospital ni tampoco en la ciudad y que solamente hay un “curioso” que hace algunas aplicaciones a los enfermos. El prelado recomienda que se compre un esclavo joven con el fin de casarlo con la esclava moza, la única que atendía a los enfermos de ese entonces.
El Hospital de San Lázaro permaneció en sus funciones médicas durante el siglo XVII y se refiere en documentos que para 1632, 1645 y 1715, así como en Cédulas Reales de 1765 y 1778 que tenía administradores o mayordomos y aportes por las rentas de bienes y censos de vecinos, además de pliegos documentales que certifican la compra de un terreno o solar en 1678 para la construcción de nuevos espacios y reparaciones del inmueble. Este hospital de San Lázaro desapareció cuando quedó derribado durante el terremoto del 26 de marzo de 1812.
Bibliografía consultada:
Avellán de Tamayo, Nieves (1992). La Nueva Segovia de Barquisimeto. 2 t. Caracas: Academia Nacional de la Historia.
Ceballos, Rafael (2008). Del Hospital de Caridad al Hospital Central de Barquisimeto 1880–1954. Barquisimeto. Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado. Ediciones del Rectorado.
Galarreta, Alejandro (2007). El servicio de urología en el Antonio María Pineda [Documento en línea] Disponible: https://docplayer.es/76854274-Alejandro-galarreta‑3.html (Consulta:23–05-2019).
Martí, Mariano (1928). Relación y testimonio íntegro de la visita general de este Obispo de Caracas y Venezuela, hecha por el Ilmo. Señor D.D. Mariano Martí. 4 t. Caracas.