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El servicio de telégrafos en Palavecino

Yolanda Aris
Cronista Oficial del municipio Palavecino

El telé­grafo fue inven­ta­do por el esta­dounidense Samuel Morse, en 1838, con­vir­tién­dose este apara­to en el primer dis­pos­i­ti­vo tec­nológi­co para comu­ni­ca­ciones a dis­tan­cia. Además, creó la clave o códi­go  morse, que per­mitía la rep­re­sentación de letras y números, medi­ante señales emi­ti­das, con pul­sa­ciones eléc­tri­c­as rep­re­sen­tadas en un sis­tema de pun­tos y rayas; que  per­mitían la trans­misión de men­sajes codificados.

En Venezuela llegó esta novedad en el año 1856 cuan­do el inge­niero español Manuel de Mon­tú­far, logró fir­mar un con­tra­to con el gob­ier­no del pres­i­dente José Tadeo Mon­a­gas. Este ser­vi­cio fue inau­gu­ran­do el 29 de mayo de ese año, con la línea Cara­cas — La Guaira. Al año sigu­iente fundó una escuela de telegrafis­tas para preparar al per­son­al necesario.

Torre del telé­grafo en Bar­quisime­to. Con­stru­i­da en 1922 y desar­ma­da  en 1962.  Se usaron tam­bién como ante­nas trans­miso­ras de una radio local en 1939

Durante la Guer­ra Fed­er­al (1859–1864) y las con­stantes rev­olu­ciones que car­ac­teri­zaron el siglo XIX, el ser­vi­cio se vio afec­ta­do por los con­tin­u­os daños que le caus­a­ban los difer­entes ban­dos a las líneas, para impedir las comunicaciones.

En 1875, durante el primer gob­ier­no de Anto­nio Guzmán Blan­co, se imple­men­tó una políti­ca de inte­gración nacional y de pro­gre­so, dán­dose­le mucha impor­tan­cia a los caminos, al correo y al telé­grafo como instru­men­tos para lograr ese cometi­do. Por lo que se impul­só la exten­sión de este ser­vi­cio a niv­el nacional, pro­movien­do la par­tic­i­pación de par­tic­u­lares, para ello.

El cabu­dareño Eduar­do Ortiz, aparece como con­tratista de la obra de con­struc­ción de ten­di­dos telegrá­fi­cos.  Bernardi­no Her­rera en su libro La Expan­sión Telegrá­fi­ca en Venezuela 1856–1936, señala que medi­ante uno de los sub­con­tratis­tas de Ortiz, se logró exten­der la línea has­ta Bar­quisime­to en 1877. (p. 96). Guzmán Blan­co en 1882 nacional­izó la empre­sa telegrá­fi­ca e instau­ró el ser­vi­cio inter­na­cional telegrá­fi­co, ini­cian­do comu­ni­ca­ciones entre Venezuela y Colombia.

En Bar­quisime­to el ser­vi­cio telegrá­fi­co comen­zó a fun­cionar en 1878, tal como lo señala Eli­gio Macías Muji­ca en su libro Sol en las Bar­das:

“…según el tradi­cional­ista Vásquez, fue estable­ci­do en 1878, y el primer despa­cho recibido en la ciu­dad, fue el que tra­jo la noti­cia de la muerte, casi repenti­na, del Gen­er­al Fran­cis­co Linares Alcán­tara, Pres­i­dente de la Repúbli­ca, acae­ci­da de modo sospe­choso en La Guaira, el 30 de noviem­bre de aquel mis­mo año. Según Vásquez el primer jefe de la ofic­i­na Telegrá­fi­ca de Bar­quisime­to fue el señor Her­mani Méri­da.” (p. 77)

Inau­gu­ración del edi­fi­cio para Ofic­i­na de Corre­os y Telé­grafo de Bar­quisime­to. 17 de diciem­bre de 1926.  Av. 20 entre calles 23 y 24. Demoli­do en 1964

Telas­co Mac.Pherson, en su Dic­cionario del Esta­do Lara señala que en 1883: “…exis­ten has­ta la fecha en el Esta­do Lara las ofic­i­nas telegrá­fi­cas sigu­ientes: Bar­quisime­to, Yaritagua, San Felipe, Quí­bor y Tocuyo; la de Cabu­dare se estable­ció durante fué (sic) esta ciu­dad Cap­i­tal inte­ri­na del Esta­do Lara. (p. 486). Es decir en 1881, cuan­do la Asam­blea Con­sti­tuyente insta­l­a­da durante 6 meses en Cabu­dare decretó dar­le el nom­bre de Lara a esta enti­dad federal.

En 1918 se pro­mul­gó la Ley de Telé­grafos y Telé­fonos Fed­erales y en 1936 se dic­tó la primera Ley de Tele­co­mu­ni­ca­ciones. En 1821 se inau­guró la telegrafía inalámbrica

El último telegrafista de Cabudare

José Eulario Big­ott Mendoza

A medi­a­dos del siglo XX, José Eulario Big­ott Men­doza ejer­cía como telegrafista en la población de Cabu­dare. Había naci­do en Acarigua, el 7 de diciem­bre de 1922, y fal­l­e­ci­do el 23 de enero de 1989 de un infar­to a los 89 años. Casó con Tere­sa de Jesús Pérez con quien tuvo un par de geme­las (Tere­sa y Nan­cy+) y 5 varones (Julio Napoleón, Eliomar, Ramón María, Enai­do y José Isaías+). Desem­peñó este ser­vi­cio durante 35 años, des­de su lle­ga­da a Cabu­dare en 1947 has­ta su muerte en 1989; con­vir­tién­dose en el últi­mo telegrafista de la cap­i­tal palavecinense.

Real­izó una desta­ca­da labor, fun­da­men­tal en esa época; donde el telé­grafo, el correo y el telé­fono con­sti­tuían los úni­cos medios de comu­ni­cación inter­per­son­al a dis­tan­cia. A la par de su tra­ba­jo, en su propia casa, se encar­gó de la for­ma­ción de nuevos telegrafis­tas, tan­to en el uso del apara­to como en la enseñan­za de la clave morse, entre ellos, los de Sarare, La Miel, Are­nales y Guari­co.  El telegrafista Jefe de la Zona de Bar­quisime­to fue Anto­nio Seitefer.

José Eulario Big­ott per­maneció pre­so en Cumaná durante dos años, por la descon­fi­an­za de la dic­tadu­ra de Mar­cos Pérez Jiménez sobre los telegrafis­tas que eran mil­i­tantes del par­tido Acción Democrática.

Telé­grafo.  J. H. Bun­nell New York. Tipe OHMS, que se uti­lizó en Cabudare

Su hijo Julio Big­ott, recuer­da que la ofic­i­na de Telé­grafos fun­cionó en la calle Juan de Dios Ponte entre Suárez y Alvizu, No. 24.  Al lado se encon­tra­ba la Ofic­i­na de Telé­fonos de Cabu­dare, en la casa de Bene­cia Linárez, la cual admin­is­tra­ba Neg­da Álvarez Casamay­or de Rodríguez, her­mana de Julio Álvarez Casamay­or. Ini­cial­mente sólo la Policía y la Ofic­i­na de Telé­grafos tenían Telé­fono y pocos con­ta­ban con este servicio.

Mar­co Aure­lio Vila en su libro Aspec­tos Geográ­fi­cos del Esta­do Lara, señala que para 1966 existían ofic­i­nas telegrá­fi­cas en:

“…Bar­quisime­to, Baragua, Bar­ba­coas, Bar­rio Nue­vo (Bar­quisime­to), Bel­la Vista, Bobare, Borau­re, Cabu­dare, Caro­ra, Cubiro, Dua­ca, El Empe­dra­do, el Eneal, El Tocuyo, Guari­co, Humo­caro Alto, Humo­caro Bajo, La Con­cor­dia, La Miel, Pie de Cues­ta, Quí­bor, Río Claro, Río Tocuyo, Sanare, Sarare, San Miguel, San Pablo de Caro­ra, Siquisique, Urban­ización del Este (Bar­quisime­to) y San­ta Rosa.” (p. 262)

Este ser­vi­cio, fue pro­gre­si­va­mente susti­tu­i­do por el telé­fono y hoy en día, por las comu­ni­ca­ciones tec­nológ­i­cas satelitales, (inter­net, what­sapp, men­sajería, telé­fonos móviles e inteligentes y tan­tas otras disponibles en la actu­al­i­dad), que per­miten la comu­ni­cación a niv­el mundi­al de man­era inmediata.


Fuentes Bib­li­ográ­fi­cas consultadas
Her­rera, Bernardi­no. La expan­sión telegrá­fi­ca en Venezuela. 1856–1936. UCV. Fac­ul­tad de Humanidades. Cara­cas, 2001
Macías Muji­ca, Eli­gio. Sol en las Bar­das. Colec­ción Autores Larens­es. Edi­ciones del Gob­ier­no del Esta­do Lara. Fun­da­cul­tura. Bar­quisime­to, 1995. 214 p.
Mac-Pher­son, Telas­co. Dic­cionario del Esta­do Lara. Históri­co, Geográ­fi­co, Estadís­ti­co y Biográ­fi­co. 3era edi­ción. Bib­liote­ca de Autores Larens­es. Edi­ciones de la Pres­i­den­cia de la Repúbli­ca. Cara­cas, 1981. 558 p.
Vila, Mar­co Aure­lio. Aspec­tos Geográ­fi­cos del Esta­do Lara. Cor­po­ración Vene­zolana de Fomen­to. Cara­cas, 1966. 274 p.

Entre­vis­tas
Entre­vista a Julio Napoleón Big­ott. (Hijo de José Big­ott Men­doza) 17-08-2021.

Fuentes Hemero­grá­fi­cas consultadas
José Big­ott Men­doza. El últi­mo telegrafista de Cabu­dare. En: El Infor­mador. 23-03-1992.

CorreodeLara

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