Memorias del cronista cabudareño Julio Álvarez Casamayor
Luis Alberto Perozo Padua
Periodista
Entre las largas conversaciones con el cronista y costumbrista Julio Álvarez Casamayor sobre el devenir histórico de Palavecino, refirió con asombrosa lucidez, que Cabudare tuvo la grandeza de recibir al contralmirante Wolfgang Larrazabal
Reseñó que la ilustre visita ocurrió el 30 de junio de 1958, “llegó con una numerosa comitiva integrada por varios ministros, entre ellos el doctor Espiritusanto Mendoza, titular de la cartera de Sanidad y Asistencia Social, sí como también el doctor Rafael Pizani, representante del Ministerio de Educación.
Larrazabal vino a Cabudare, narró con orgullo, para atender una invitación que le dispensara el señor Roseliano Palacios, presidente de la Junta Promejoras de Cabudare. Fue recibido con honores por los poderes públicos en la antigua Casona de Gobierno (Hoy edificio de la Escuela de especialidades Luisa Cáceres de Arismendi).
El profesor Francisco José (Coché) Rojas Rodríguez, luego de la salutación oficial, leyó a nombre de la referida junta una exposición sobre la necesidad de adquirir la Hacienda La Mata, propiedad del doctor Julio Alvarado Silva, valorada en un millón 500 mil bolívares, para resolver problemas concretos como prever la expansión de Cabudare y la construcción de un acueducto para la población actual, servicio de cloacas, dado el aumento en el caudal de aguas disponibles para el acueducto.
Tierras ejidales que daría cabida a fábricas, industrias y urbanizaciones, que garantizarían la estabilidad económica del colectivo “ya que cabudare estaba cercada por todos los puntos cardinales de haciendas como Tarabana, San Antonio, La Capilla (Santa Bárbara fraccionada) y La Mata”.
Francisco José (Coché) Rojas, Julio Álvarez Casamayor (Centro) y Dante Rojas Valbuena con templo matriz de Cabudare San Juan Bautista
“En su voz pausada no se percibió respuestas a los pedimentos que le hiciera la junta”, apuntó Álvarez, añadiendo que Larrazabal recibió un ramo de flores de
las niñas Zuleima Ponte y Nelly Troconis. De allí el candidato presidencial para el nuevo periodo, visitó la iglesia San Juan Bautista y admiró la imagen del Nazareno.