CrónicasReportajesTodas Las Entradas

Bolívar también confiscó bienes pertenecientes al erario real

 

Haciendo un acto de justicia republicana en plena guerra de nuestra independencia, un día como hoy, el Libertador Simón Bolívar confisca la hacienda Ceiba Grande, perteneciente al erario real. 

Por medio de un decre­to orde­na de for­ma inmedi­a­ta quitar, no solo esta hacien­da sino, todo cuan­do esté a nom­bre de los españoles, que en el caso de la Cei­ba la orde­nan­za decía así: “(…) los esclavos que fueron pertenecientes a esta hacien­da son des­de hoy en ade­lante per­pet­u­a­mente libres y por con­sigu­iente ciu­dadanos de Colom­bia”.⠀

El Lib­er­ta­dor tam­bién con­fis­có propiedades de los españoles

En el artícu­lo 3º com­ple­ta: “Están com­pren­di­dos en este decre­to, así los hom­bres como las mujeres y niños, con la sola condi­ción de que los hom­bres útiles de lle­var las armas las tomarán mien­tras dure la actu­al guer­ra, y en caso de deser­ción o aban­dono serán cas­ti­ga­dos como los demás sol­da­dos del ejército”.⠀

Bolí­var sumó a los esclavos y a todo aquel que con­sid­er­a­ba útil para el com­bate en tiem­pos en que la guer­ra diezma­ba a la población, porque la úni­ca meta era lograr el tri­un­fo con la unidad de su gente y así, conc­re­tar la lib­er­tad de toda una nación.

Adju­di­cación de bienes
El 10 de octubre de 1817 el Lib­er­ta­dor Simón Bolí­var decretó la con­fis­cación de los bienes de los españoles y real­is­tas para repar­tir­los y adju­di­car­los a los jefes, ofi­ciales y sol­da­dos del Ejérci­to Lib­er­ta­dor. De acuer­do con este decre­to, el repar­to se haría según los gra­dos de cada uno, des­de 25.000 pesos a los gen­erales has­ta 500 pesos a los sol­da­dos. Al fir­mar el decre­to, Bolí­var proclamó: “Esta Ley, la más jus­ta y útil, es el tes­ti­mo­nio más autén­ti­co de los prin­ci­p­ios rec­tos y bené­fi­cos del Gob­ier­no Supre­mo de Venezuela. Es el pre­mio, es la rec­om­pen­sa de los que han der­ra­ma­do su san­gre por romper las cade­nas que esclav­izan la Patria y es la que ase­gu­ra a los servi­dores, después de tan­tos ser­vi­cios, una sub­sis­ten­cia para ellos y sus famil­iares. Ya, pues, no habrá mendi­gos en Venezuela: todos serán propietarios”.

Pub­li­ca­do por Cul­turísi­ma

CorreodeLara

Esᴛᴀ́ ᴜsᴛᴇᴅ, ᴅɪsᴛɪɴɢᴜɪᴅᴏ ʟᴇᴄᴛᴏʀ, ᴇɴ ᴛᴇʀʀɪᴛᴏʀɪᴏ ᴅᴇ ʜɪsᴛᴏʀɪᴀ, ᴅᴇ ʜᴏᴍʙʀᴇs ᴄɪᴠɪʟɪsᴛᴀs, ʏ sᴏʙʀᴇ ᴛᴏᴅᴏ, ᴅᴇ ɢʀᴀɴᴅᴇs ᴀᴄᴏɴᴛᴇᴄɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ϙᴜᴇ ᴍᴀʀᴄᴀʀᴏɴ ᴜɴ ʜɪᴛo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *