CrónicasSemblanzas

Antonio Martínez, el realista que salvó a Páez

Luis Heraclio Medina Canelón
Historiador

La guerra de Independencia fue una guerra civil. La historia mal contada, tergiversada y manipulada de la Guerra de Independencia ha querido presentar esa conflagración como una guerra internacional, como una conflagración entre dos naciones: España y Venezuela y como si los combatientes estuvieran claramente identificados entre españoles contra americanos, pero nada más falso. Aquella no era una guerra internacional, era una terrible guerra civil, una confrontación fratricida, donde de lado y lado había tanto españoles como americanos.  Lo correcto es hablar de independentistas o republicanos contra realistas o monárquicos


En el ban­do repub­li­cano o inde­pen­den­tista, aunque muchos lo igno­ran, hubo muchos españoles que eran par­tidar­ios de la sep­a­ración de las provin­cias amer­i­canas de la Madre Patria y a su vez, en el ban­do de los par­tidar­ios del rey había muchísi­mos vene­zolanos y amer­i­canos en gen­er­al, que eran fieles súb­di­tos de la coro­na.  Para un botón, quizás el más rep­re­sen­ta­ti­vo: se cal­cu­la que aprox­i­mada­mente el noven­ta por cien­to de las tropas de José Tomás Bóves, (esas que acabaron con la segun­da repúbli­ca) eran criol­li­tos: Par­dos, zam­bos, negros e indios para más señas. Y esta no era la excep­ción, era lo común. 

Sólo con la expe­di­ción de Pablo Moril­lo, fue que llegó un con­sid­er­able número de sol­da­dos españoles para com­bat­ir a los insur­gentes,  pero estas tropas españo­las vinieron a sumarse a las tropas leales al rey que des­de ini­cio de la guer­ra com­bat­ían a los ene­mi­gos de la corona.

Es por eso que en la batal­la de Carabobo no se enfrentan “amer­i­canos con­tra españoles”.  Allí, las tropas real­is­tas del mariscal La Torre cuen­tan en sus filas con un impor­tante número de sol­da­dos criol­li­tos, pero leales al rey y por supuesto, los restos de la expe­di­ción de Moril­lo. Entonces en Carabobo, se enfrentaron, si no en todos los casos, si en muchos, sol­da­dos vene­zolanos repub­li­canos con­tra sol­da­dos vene­zolanos real­is­tas. Así fue la guerra.

EL SALVADOR DE PÁEZ

Es har­to cono­ci­do que el gen­er­al José Anto­nio Páez sufría de cier­tos prob­le­mas nerviosos: En pleno com­bate solía ocur­rir­le un ataque de excitación nerviosa, que lo par­al­iz­a­ba, algo así como un ataque de epilep­sia, que sólo lo podía super­ar al rato y luego de refres­carse con agua fría en la cara.

Pues bien, el 24 de Junio de 1821 en pleno fragor de la batal­la de Carabobo, luego de que Páez con su caballería logra la ren­di­ción batal­lón Bar­bas­tro, el gen­er­al llanero, jun­to a otros 300 jinetes se enfrenta a los escuadrones de Morales en el “Zan­jón del Guaya­bal”. pero sucede que en pleno com­bate le viene a Páez el ataque de epilep­sia y pierde el sentido. 

Y aquí ocur­rió un hecho que todavía doscien­tos años después nadie ha podi­do explicar: El coman­dante real­ista Anto­nio Martínez logra sacar a Páez del tro­pel, agar­ra por las rien­das el cabal­lo del gen­er­al y lo lle­va has­ta donde se encuen­tra un teniente repub­li­cano lla­ma­do Ale­jan­dro Salazar, cono­ci­do como “Guadalupe” y lo hace mon­tar a la gru­pa del cabal­lo de Páez para que éste no cay­era y entre ambos lo lle­van a sal­vo tras las líneas repub­li­canas, donde este se recu­pera para luego volver al com­bate. El pro­pio Páez reconoce que si Martínez no acude en su aux­ilio, lo más posi­ble es que hubiera muer­to en el sitio. Páez no tiene expli­cación a la con­duc­ta de su sal­vador, el temi­ble coman­dante Martínez.

¿PERO QUIÉN ERA ANTONIO MARTÍNEZ?

Según lo nar­ra el pro­pio Páez, Anto­nio Martínez era un ofi­cial de caballería real­ista, antiguo en la guer­ra, criol­lo nato, llanero naci­do en el Pao, que esta­ba com­bat­ien­do con­tra la repúbli­ca des­de los tiem­pos en que esta­ba nada menos bajo las ordenes del san­guinario Bóves. Se había dis­tin­gui­do por ser una de las lan­zas más temi­bles del gen­er­al asturiano.

Antes de Carabobo lo encon­tramos men­ciona­do en el Archi­vo de La Torre  (“Doc­u­men­tos del Conde Tor­repan­do – Ejérci­to Expe­di­cionario de Cos­ta Firme” edi­ta­do por la españo­la Real Acad­e­mia de la His­to­ria Madrid 1985) a las ordenes de La Torre, donde figu­ra con su nom­bre com­ple­to: José Anto­nio Martínez. 

Allí aparece como encar­ga­do de la “recogi­da de gana­do”, fun­ción vital para el man­ten­imien­to de la tropa (Cal­abo­zo mar­zo de 1821) y más ade­lante en el mis­mo archi­vo de La Torre apare­cen dos ofi­cios de Martínez; en uno infor­ma sobre el robo de cabal­los y mulas por parte de los insur­gentes y en el otro da cuen­ta de que el coman­dante patri­o­ta Juan José Rondón donde lo ins­ta a que se pase para el ban­do repub­li­cano, donde se le respetará su jer­ar­quía. Segu­ra­mente se encon­tra­ba bajo las órdenes direc­tas del coro­nel real­ista José Pereira para esos momentos.

Para el momen­to de la batal­la servía en una unidad de caballería bajo las ordenes de Morales.  Posi­ble­mente Martínez fue hecho pri­sionero o se rindió,  ya que Páez men­ciona que

“Estu­vo con nosotros la noche de la acción de Carabobo, pero no amaneció en el campamento…”

De donde pre­sum­i­mos que escapó y de algu­na man­era pudo lle­gar has­ta reunirse nue­va­mente con los suyos, en Puer­to Cabel­lo. Allí se habían con­cen­tra­do los restos de las tropas real­is­tas der­ro­tadas en Carabobo, que se sumaron a la guar­ni­ción del lugar. 

José Anto­nio Páez, litografía

Entre los primeros se encon­tra­ban doscien­tos jinetes criol­los, lo que nos da una idea de la enorme can­ti­dad de vene­zolanos que había entre las tropas real­is­tas.  En Agos­to llegó al Puer­to un famoso jefe de la caballería de Bóves, otro llanero de nom­bre José Ale­jo Mira­bal, a quien La Torre le orde­na diri­girse a Cal­abo­zo para inten­tar rev­olu­cionar el llano a favor del rey y reco­brar la provin­cia. Mira­bal se desem­bar­có en Morón, de allí a Canoabo y llegó has­ta El Pao,  lle­van­do con­si­go a los doscien­tos llaneros y con ellos al coman­dante Anto­nio Martínez. 

En el llano las fuerzas de Mira­bal y Martínez aumen­taron has­ta 500 jinetes llaneros real­is­tas, pero se enfrentaron con los repub­li­canos en Guar­dati­na­jas donde fueron der­ro­ta­dos y la colum­na quedó total­mente dis­uelta. A los pocos días Mira­bal se entregó en El Pao. 

Al saber de la der­ro­ta de los renu­entes real­is­tas, Páez envió un indul­to a su sal­vador Martínez, pero el correo fue inter­cep­ta­do y el doc­u­men­to destru­i­do. Segu­ra­mente el gen­er­al Páez quería traerse al bra­vo llanero para las filas patri­o­tas, y quizás no sería la primera vez que los del lado repub­li­cano trataron de con­vencer­lo para la causa inde­pen­den­tista. Has­ta allí le seguimos la pista al ofi­cial real­ista llanero, ya que su ras­tro se pierde en la historia.


FUENTE
Alcán­tara Borges, Arman­do. “Carabobo Sendero de Lib­er­tad.” Edi­ciones del Gob­ier­no de Carabobo. Valen­cia 1882
León Tel­lo, Pilar “El Ejérci­to Expe­di­cionario de Cos­ta Firme – Doc­u­men­tos del Conde de Tor­repan­do Con­ser­va­dos en el Archi­vo Históri­co Nacional. Real Acad­e­mia de la His­to­ria. Madrid. 1985
Páez, José Anto­nio. “Auto­bi­ografía”. Vol­u­men I. Libr­ería y Edi­to­r­i­al del Mae­stro. Cara­cas. 1956

CorreodeLara

Esᴛᴀ́ ᴜsᴛᴇᴅ, ᴅɪsᴛɪɴɢᴜɪᴅᴏ ʟᴇᴄᴛᴏʀ, ᴇɴ ᴛᴇʀʀɪᴛᴏʀɪᴏ ᴅᴇ ʜɪsᴛᴏʀɪᴀ, ᴅᴇ ʜᴏᴍʙʀᴇs ᴄɪᴠɪʟɪsᴛᴀs, ʏ sᴏʙʀᴇ ᴛᴏᴅᴏ, ᴅᴇ ɢʀᴀɴᴅᴇs ᴀᴄᴏɴᴛᴇᴄɪᴍɪᴇɴᴛᴏs ϙᴜᴇ ᴍᴀʀᴄᴀʀᴏɴ ᴜɴ ʜɪᴛo

2 comentarios en «Antonio Martínez, el realista que salvó a Páez»

  • Buen adne­do­ta de esa parte de la vida de paez que descono­ce­mos lo con­tare en una prox­i­ma pre­gun­ta de his­to­ria de venezuela .

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  • HAY PEROSNAS QUE SIN SABERLO NO CAMBIAN LA VIDA DE UNA PERSONA SINO DE TODA UNA NACION, DE HABERLO MATADO NO HABRIA ASCENSO PARA ÉL POR PARTE DE BOLIVAR, NO HUBIERA TENIDO CHANCE DE TRAICIONAR AL LIBERTADOR NI MUCHO MENOS SER VARIAS VECES PRESIDENTE DE VENEZUELA.….. CAMBIO DE DESTINO

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